MADRID, 10 Jul. (TRENDSmérica) -
París dice adiós a la Alta Costura tras cinco días llenos de glamour, pedrería y musas de la moda.
La Alta Costura de la capital francesa, que se dio cita del 5 al 9 de julio, presentó las últimas apuestas para la próxima temporada Otoño-Invierno 2015/2016.
Atelier Versace fue la encargada de abrir los desfiles el pasado domingo, y lo hizo transformando la pasarela en un jardín de ensueño. De hecho, la diseñadora Donatella Versace cubrió el suelo con 25.000 orquídeas en tonos amarillos y violetas, protegidas por un cristal sobre el que caminaban las modelos.
Los tonos negros, azules y rosados dominaron en las creaciones de la firma, confeccionadas con tejidos vaporosos y transparencias.
Aunque sus prendas no fueron lo único que brilló en la pasarela. Como una bella ninfa apareció también Kendall Jenner, de 19 años, quien, con un vestido de diseño gótico en plata y negro, se hizo con todas las miradas de los espectadores.
FENDI CREA POLÉMICA CON EL USO DE LAS PIELES
En esta ocasión, la moda en París tampoco estuvo exenta de polémica. Karl Lagerfeld, al mando de la marca Fendi, decidió debutar en este 'fashion show' con una primera colección basada en las pieles.
Las reacciones no se hicieron esperar, provocando un gran número de protestas por parte de activistas y defensores de los derechos de los animales. Sin embargo, esta respuesta no pilló por sorpresa al diseñador, quien ya había contratado un servicio extra de seguridad a la entrada de la bolsa de valores de París, el edificio que acogió a la Alta Costura
Y de un escenario revolucionario a otro idílico. El diseñador libanés Elie Saab fue fiel a su estilo, convirtiendo a las modelos en auténticas princesas. El oro fue el protagonista de su colección de ensueño, aunque tampoco faltaron en su paleta el negro, el verde y los tonos granates, siempre sin olvidar los bordados y la pedrería.
Uno de los desfiles más originales de la temporada ha sido el de la firma Viktor&Rolf, con la que la afirmación de que la moda es arte quedó plasmada literalmente, al transformar a las mujeres en cuadros andantes.
LAS APUESTAS DE CHANEL Y LOS SUEÑOS DE MURAD
Chanel, por su parte, uno de los shows más esperados de esta edición, lo apostó todo con sus creaciones. Karl Lagerfeld dejó a los presentes estupefactos al hacer del escenario un auténtico casino. Repleto de glamour, por su puesto.
En un desfile lleno de colores fríos, neutros y algún que otro vestido de color rojo, han destacado las chaquetas toreras y las faldas lápiz cuya altura queda ligeramente por encima de la rodilla para reinventar el icónico traje de Coco Chanel y hacer que los asistentes apostaran por la alta costura del diseñador alemán, una vez más.
Entretanto, Lagerfeld no fue el único que le dio un especial protagonismo a la puesta en escena. Zuhair Murad, por su parte, hizo soñar a los espectadores con un cielo estrellado que se plasmaba también en sus diseños, llenos de detalles en pedrería.
El 'look navy' con Jean Paul Gaultier, la exaltación de lo femenino con Dior y lo musical de la moda con Franck Sorbier, que transformó la pasarela en un escenario de ballet clásico con bailarinas luciendo sus creaciones. En la Alta Costura de París hubo espacio para todas las ideas y conceptos de moda o elegancia.
El broche final lo puso este jueves Azzaro, quien celebró el fin de este show convirtiendo la pasarela en una discoteca de los años setenta. Así, con diseños fluidos y entre tonos violeta, metalizados, azul eléctrico y lima, la firma despidió, acompañado de otras importantes marcas como Marangoni Instituto París, Coppelia Piqué, Zvonko Markovic , Eymeric François, Reouven Zana y Maison Anggy Haif, a la semana de la Alta Costura de París hasta la próxima cita, donde la moda hará soñar a los asistentes una vez más.