BRASILIA, 22 Nov. (Notimérica) -
La industria del calzado de Brasil espera producir, para este próximo año 2015, alrededor de 850 millones pares de zapatos con el objetivo de seguir abasteciendo el mercado interno, que supera los 200 millones de habitantes, pero en especial, para seguir fortaleciendo sus exportaciones.
Para ello, la Asociación Brasilera del Calzado (Abicalçados), sigue fortaleciendo cada uno de los sectores, en especial aquellas ferias pequeñas y medianas, para que sean atractivas a más compradores internacionales.
Una de ellas es 'Zero', una de las dos ferias que se realiza en Gramado, una pequeña y joven población del sur de Brasil, a 125 kilómetros de Porto Alegre, donde esta semana desarrolló su edición 2015.
Su gran atractivo fue presentar el adelanto de las colección Otoño-Invierno, que oficialmente se estrenará en el mes de enero en Couromoda, en Sao Paulo, una de las ferias de calzado más grandes del continente.
'Zero' se complementa con otra feria en esta ciudad, el Salón internacional del cuero y del calzado, donde se presentan los adelantos de las colecciones Primavera-Verano.
Brasil se ha convertido en los últimos años en el tercer productor de calzado en el mundo, por lo que con el crecimiento de la oferta, ha sido necesario crear los espacios idóneos para presentar dicha oferta, tanto al mercado nacional como al internacional.
Se trata de un momento "clave" para la industria del calzado de Brasil, ya que, tras posicionarse como el tercer productor de zapatos en el mundo por el volumen que genera, ha trabajado intensamente en superarse en calidad, diseño y tecnología, informa Colprensa.
La industria brasileña ya piensa así en el 2015, luego de un año que no fue lo esperado. "Tuvimos una serie de circunstancias en el mercado que afectaron de manera notable la demanda de calzado, entre otros artículos. Por un lado el problema de la inflación, lo que disminuyó la capacidad de consumo de las familias, y esta inflación fue mucho más notable en el área de los alimentos, con una elevación de un 30 por ciento en el precio de los alimentos", dijo el presidente de Abicalçados, Heitor Klein.
También influyó, según Klein, la Copa Mundial de Fútbol, pues muchos brasileros gastaron mucho más en comida y bebida, tomando el dinero del consumo habitual de calzado o ropa.
Además los turistas que llegaron al país durante el evento deportivo orbital, tuvieron que soportar también altos costos en alimentación, entradas y transporte, lo que hizo que no consumieran calzado brasilero como se esperaba.
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