NUEVA YORK, 2 Ene. (Notimérica) -
La madre de una joven que sufre desde hace tiempo parálisis cerebral cuadruplejia espástica (ACV) ha mandado una carta a la aerolínea estadounidense United Airlines denunciando el comportamiento de los miembros de la tripulación de su vuelo de Punta Cana (República Dominicana) a Newark, Nueva Jersey (Estados Unidos), donde ambas viajaban con otros cuatro miembros de la familia.
Elit Kirschenbaum es madre de cuatro niños de tres, seis, ocho y once años, y el pasado martes viajaba con ellos y con su marido Jeff en el vuelo 1515 de la compañía United Airlaines hacia Nueva Jersey, según ella misma indica en una carta que ha escrito para que la compañía se disculpe con su hija más pequeña, Ivy.
La niña, de tan solo tres años, padece ACV y no puede valerse por sí misma, de modo que para viajar va sentada en el regazo de su madre como ya ha hecho otras veces, incluso viajando con la misma aerolínea.
Tal y como la señora Kirschenbaum indica en su comunicado, su hija Ivy no despertó la atención de tres de los cuatro miembros de la tripulación de cabina. Sin embargo, la cuarta azafata se paró frente a la familia y señaló que la pequeña debía colocarse en su sitio.
Después de explicar la situación de la niña, "la azafata pidió un billete de avión y preguntó si habían comprado otro para la niña". La familia respondió que en efecto lo tenían pero que la niña era incapaz de sentarse.
La azafata consultó con sus compañeros y después volvió para discutir con la familia citando algunas normas de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés). Luego, la misma joven hizo que algunos miembros del personal del aeropuerto aleccionaran a la familia sobre cómo debía sentarse un pasajero, algunos de esos trabajadores tenían un inglés limitado y la familia, "claramente americana" hablaba muy poco o nada de español.
"Ella insistió en crear una escena", indica Kirschenbaum tras señalar que, aunque los tres azafatos estaban a su favor, la cuarta mencionada no cedía ante la situación.
Finalmente la tripulación de cabina encontró una cláusula en el Manual de Auxiliares de Vuelo que señala que "si un pasajero es incapaz de sentarse de forma independiente puede hacerlo en el regazo de otro". Aún así la azafata hizo caso omiso, así que Jeff fue a hablar con el piloto para pedir una solución para todos.
El piloto entendió la situación, la niña estaba sentada y abrochada para despegar y aterrizar, pero tenía que tumbarse en el regazo de su padre durante esos momentos porque es incapaz de incorporarse. De ese modo, la niña pudo sentarse en el regazo de su madre la otra parte del vuelo, pero salieron una hora tarde por culpa de una azafata "sin compasión alguna".
"Cuando aterrizamos, muchos pasajeros se aproximaron y me dijeron que tenían intención de contactar con United para expresar el horrorífico trato que había tenido uno de los miembros de la tripulación", asegura Kirschenbaum al final de su publicación.
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