Publicado 03/03/2025 14:31

Trini Martínez, auxiliar de ayuda a domicilio en Alfafar el día de la dana: "Pudimos sacar vivos a todos"

Trini Martínez, auxiliar de ayuda a domicilio que se encontraba el Alfafar el día de la dana
Trini Martínez, auxiliar de ayuda a domicilio que se encontraba el Alfafar el día de la dana - CEDIDA POR TRINI MARTÍNEZ

   Rememora la noche en la que "todos fueron una piña" y salvaron a quienes residían en la planta baja: "Me emociono de sólo recordarlo"

   MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

   Trini Martínez tiene 52 años y dedica su vida a ayudar a los demás. No sólo porque actualmente sea auxiliar de ayuda a domicilio --trabajo que desempeña desde hace dos años-- sino porque antes ayudaba en una academia a menores desfavorecidos. "He pasado de ayudar de unos a otros", bromea, aunque su tono cambia al recordar el día que estuvo en Alfafar, el ya fatídico 29 de octubre de 2024, cuando una dana asoló gran parte de la provincia de Valencia.

   "Me emociono de sólo recordarlo. Pudimos sacar a todos, vivos", asevera al narrar a Europa Press cómo entre ella y unos jóvenes pudieron ayudar a las personas mayores que vivían en el bloque en el que se encontraba prestando servicio.

   Trini trabaja en una cooperativa de servicios sociales llamada La Terreta para "intentar que la vida sea mejor". "Hago un poco de todo para las personas que necesitan ayuda, ya sean mayores, jóvenes, niños, dependientes", apostilla. Por su tarea diaria, recorre varios pueblos de la provincia de Valencia o trabaja en la capital.

   El pasado 29 de octubre, le ofrecieron hacer una suplencia por la tarde en Alfafar. "Y esa tarde no tenía nada que hacer y se trataba de una persona con demencia, no la puedes dejar sola", recuerda, al tiempo que añade que pudo llegar "sin problema" a la localidad, en concreto, al barrio de Orba, una zona humilde donde reside la mujer a la que tenía que cuidar, en una casa de cuatro plantas sin ascensor.

   "Estuve con ella toda la tarde y estábamos tranquilas. Vimos en la televisión cómo hablaban de las lluvias que estaba sufriendo Letur (Albacete) por la dana. Tengo familia en l'Alcúdia y ya me contaron que estaban sacando los coches, pero como está a unos 40 kilómetros, nunca pensamos que fuera a llegar aquí", detalla.

   Pero todo cambió "en cuestión de momentos", precisa. Y es que, de pronto, empezó a llover más fuerte y el agua empezó a subir. "Había dos chicas y su entrenador jugando en un campo de fútbol y vinieron a refugiarse a nuestro bloque. Menos mal, porque con su ayuda pudimos evacuar a la gente mayor que vivía en la planta baja y subirlos al piso de arriba", asegura.

   Por suerte, en esos instantes donde aún había luz, pudo avisar a su familia y a su coordinadora porque sabía que no iba a poder marcharse de allí, pues había tal cantidad de agua que era imposible salir a la calle. Luego, las comunicaciones empezaron a fallar. "Sólo funcionaban los sms, llegaban tarde pero sí llegaban", explica.

   En ese momento su voz se quiebra, al recordar esas primeras horas, donde sólo existía la luz de las velas. "Por suerte pudimos sacarlos a todos, vivos", subraya, ya que una de las viviendas del bajo se inundó y no pudieron abrir la puerta para sacar a sus ocupantes "hasta las cuatro de la mañana".

   "Aquella noche hicimos piña, la gente bajaba mantas para que otros entraran en calor, se hicieron camas en el suelo para poder descansar. Había pocos recursos pero todo el mundo quería ofrecer lo que tuviera a mano para ayudar", destaca.

   En cualquier caso, califica aquella noche como "horrorosa" pues estaban "pendientes de que el agua no llegara al primer piso". "Era dónde estábamos y, si hubiera subido más, hubiéramos tenido que subir a la gente a otra planta", explica, para añadir que, con el paso de las horas, el agua empezó a bajar. "Y la calle estaba limpia, porque todo se lo había llevado el agua", indica.

   En este punto, precisa que, "a día de hoy, aún no sabe dónde" está su coche ya que, al igual que el resto de vehículos, "acabaron flotando como hojas". Además, desmiente que la tónica general fueran los saqueos y recuerda a un joven que llevaba un carro lleno de productos al que preguntaron y él les explicó que eran para los vecinos que no podían salir de su casa. "Ahora toca ser buena persona", les respondió.

"COMO SI ESTUVIESE EN UN VIDEOJUEGO"

   Trini no salió a la calle hasta la tarde siguiente, cuando una persona se quedó con la mujer a la que había ido a atender. En ese momento, asegura que se sintió "como si estuviese en un videojuego", donde las familias marchaban con lo puesto hacia Valencia. "Era como un éxodo, como en 'Walking Dead'", indica, para puntualizar que "no pensaba que había tantos destrozos".

   La mujer regresó andando a Valencia, un camino que hizo "llorando" y acompañada de personas que "querían salir de allí". "Todo era caótico pero, al cruzar el puente que une Valencia con los pueblos, la gente estaba haciendo vida normal, practicando deporte, tomando un café... En ese momento me sentí como si hubiese acabado la película", rememora.

   Además, aunque por su trabajo no pueden tener los teléfonos de las personas a las que atienden, señala que el hijo de la mujer a la que fue a cuidar le dejó su número antes de la tragedia por si su madre se ponía peor, una casualidad que permitió que ella pudiera avisarle de que no fuera al barrio, porque su madre "estaba bien y era imposible llegar o salir".

   Gracias a este contacto, supo luego que todos los vecinos, incluida la usuaria que necesitaba el servicio, están "bien" y una ambulancia pudo atender por hipotermia a los que inicialmente habían quedado atrapados en su domicilio. "Todo fue un desastre pero todos estaban vivos", afirma aliviada.

   Trini reconoce que, tras lo ocurrido, ha intentado regresar pero no ha podido, ya que sólo le sale "llorar de tanta devastación" que ha visto. "Ha sido demasiado y no hay suficientes albañiles para arreglar tanto desastre", lamenta.

   En este punto, detalla que la zona tardó "en recuperar la normalidad" lo que supone "un obstáculo para las personas mayores, que no tienen ni dónde ir para comprar pan". "Si eres joven no te importa andar, pero no es el caso", asevera, para reclamar que "se agilicen las ayudas a la dependencia en estas situaciones". Además, lamenta que, aunque "muchas empresas están abriendo, otras muchas no".

   Por todo ello, en la antesala de este 8 de Marzo, Día de la Mujer Trabajadora, Trini hace un llamamiento "a no dejar de luchar, avanzar, porque, pase lo que pase, siempre hay alguien a quien ayudar".

    El testimonio de Trini forma parte de una serie de perfiles recogidos por Europa Press con motivo de la celebración del 8M, que este año se centrará en diversas mujeres que han sufrido la dana que afectó principalmente a Valencia el pasado 29 de octubre y dejó más de 200 fallecidos.

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