CIUDAD DE MÉXICO, 23 May. (Notimérica) -
Corre el mito por México de que los chilangos, que es como llaman los mexicanos a los oriundos de Ciudad de México, se han vuelto inmunes a la espesa nube de contaminación que cubre la capital mexicana estos días.
El experto en toxicología ambiental y daño respiratorio, Carlos Falcón, tiene la respuesta: "la contaminación nos ha hecho más fuertes. A mi no me arden los ojos, ni me duele la cabeza, mientras que alguien de provincias que viene unos días a la capital sí puede presentar estos síntomas".

El ozono es un gas que afecta al sistema respiratorio incrementando las crisis asmáticas y la inflamación causada por alergias. Además, la exposición constante a este gas puede provocar problemas cardiovasculares. Sin embargo, parece que el metabolismo de los chilangos se ha familiarizado con los efectos de la polución.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que la contaminación atmosférica provoca en el mundo tres millones de muertes prematuras cada año, según ha informado 'Verne México'.