CIUDAD DE MÉXICO, 25 sep (Reuters/Notimérica)-
Cuando Alejandro Rojas salió a recorrer las calles de la Ciudad de México después del brutal terremoto que derrumbó decenas de edificios en el país, se dio cuenta que la magnitud del desastre rebasaba por mucho sus posibilidades de ayudar.
Tomó su motocicleta y regresó a su oficina en uno de los barrios más afectados de la capital y, con un grupo de amigos de diversas ocupaciones, el publicista de 26 años empezó a delinear una plataforma para conectar a los habitantes de inmuebles dañados con profesionales dispuestos a darles su opinión.
Casi una semana después, su sitio www.salvatucasa.mx tiene datos de más de 3.000 viviendas con posibles daños, que aguardan para ser evaluadas sin costo por más de 500 ingenieros y arquitectos que hasta el lunes se habían registrado como voluntarios. "Sabíamos que el Gobierno estaba desbordado. Sólo queríamos poner un granito de arena", dijo Rojas. "Lo que no esperábamos es esta ola (de solicitudes) que se nos ha venido encima".
El Colegio de Ingenieros Civiles de México lanzó la semana pasada una aplicación móvil similar, pero la asociación no respondió de inmediato a solicitudes de comentarios.
En un país con cada vez más usuarios de Internet, el envío de mensajes de texto y WhatsApp ayudó a los socorristas a localizar a muchas personas atrapadas entre los escombros del sismo magnitud 7.1 que también desató exacerbadas muestras de solidaridad entre la población.
En México, al menos 65,5 millones de personas utilizan Internet y hay 60,6 millones de usuarios de teléfonos inteligentes, alrededor de la mitad de la población del país, según datos del instituto de estadísticas.
Luis Felipe Ángeles, de 25 años, buscaba alojamiento para él y su perro a través de micasaestucasamexico.com, que apareció en la red los días posteriores al terremoto para poner en contacto a familias que se quedaron sin techo con quienes pueden ofrecerles un hogar temporal sin cobrar nada. "Había publicado en Facebook mi situación y una amiga me mandó una imagen (del sitio). A ver si puedo encontrar algo que me ayude", comentó el empleado de una consultoría.
No fue posible contactar a los desarrolladores del sitio, pero además de Ciudad de México la plataforma ofrece opciones de alojamiento los estados Puebla y Morelos, cerca del epicentro, y en el Estado de México, que también sufrieron severos daños.
MediQó es otra aplicación móvil que desde hace un par de años pone en contacto a pacientes con especialistas médicos, pero a partir del terremoto comenzó a ofrecer consultas gratuitas a víctimas de la capital.
"Todos sufrimos de cierta forma los estragos del terremoto y en el mismo sentido queríamos formar parte de la ayuda", comentó el director de la plataforma, Adrián Híjar, quien dijo que la idea de las consultas sin cargo surgió luego de que tuvo que desalojar su propia vivienda tras el terremoto.