Publicado 16/07/2024 12:32

El Salvador.- HRW denuncia graves violaciones de los DDHH de los niños durante el régimen de excepción en El Salvador

Archivo - December 24, 2022, San Salvador, El Salvador: Kids walk through a passage as soldiers stand guard..Police and military perform a siege in the Tutunichapa Community, a historical point for drug trafficking in the Salvadoran capital, as part of th
Archivo - December 24, 2022, San Salvador, El Salvador: Kids walk through a passage as soldiers stand guard..Police and military perform a siege in the Tutunichapa Community, a historical point for drug trafficking in the Salvadoran capital, as part of th - Europa Press/Contacto/Camilo Freedman - Archivo

MADRID 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

La ONG Human Rights Watch (HRW) ha alertado de que niños y adolescentes salvadoreños han sufrido graves abusos contra los Derechos Humanos por parte de las propias fuerzas de seguridad de El Salvador en el marco del draconiano régimen de excepción decretado en marzo de 2022 por el presidente Nayib Bukele en un intento por acabar con la violencia y los homicidios en el país.

La organización ha publicado este mismo martes un último informe sobre la situación en la nación centroamericana en el que documenta casos de detenciones arbitrarias, tortura y otras formas de malos tratos contra niños y adolescentes arrestados en el marco de un régimen de excepción que el presidente Bukele llegó a elevar a la categoría de "guerra contra las pandillas".

Estos menores han sido sometidos a condiciones deplorables en prisión, incluyendo situaciones de hacinamiento, falta de alimentación y atención médica adecuada, así como ausencia de contacto con abogados y familiares. Muchos han sido condenados por delitos definidos con trazo grueso y en juicios con violaciones al debido proceso.

De acuerdo con HRW, las fuerzas de seguridad de El Salvador han llevado a cabo "innumerables redadas" --especialmente en zonas donde la violencia de las pandillas era "una presencia constante"-- y han detenido a unas 80.000 personas, incluyendo cerca de 3.000 menores que ya habían visto como sus expectativas de futuro quedaban limitadas por el impacto de la violencia de las pandillas.

"Los arrestos indiscriminados han llevado a la detención (...) de numerosos niños sin ninguna conexión aparente con las actividades abusivas de las pandillas", ha alertado la ONG, que incide en que en muchas ocasiones estas detenciones están basadas simplemente en la apariencia física o las condiciones socioeconómicas de los menores.

En algunas ocasiones se ha llegado a registrar detenciones en condiciones violentas, como el caso de un joven de 16 años que, en su camino de vuelta a casa tras jugar un partido de fútbol, fue interceptado por militares que le obligaron a desvestirse y le quemaron el torso para que confesara a qué pandilla pertenecía, según ha relatado un familiar a HRW.

Así las cosas, la directora de la División de las Américas de HRW, Juanita Goebertus, ha instado al Ejecutivo salvadoreño a "implementar una política de seguridad efectiva y respetuosa de los Derechos Humanos que desmantele las pandillas, prevenga el reclutamiento de niños y les proporcione protección y oportunidades" pero dejando a un lado las "detenciones indiscriminadas".

CENTROS PENITENCIARIOS SOBREPOBLADOS

Así las cosas, estos encarcelamientos masivos han derivado en que el ya de por sí frágil sistema penitenciario de El Salvador se enfrente ahora a unas condiciones de sobrepoblación. Más de mil niños han sido condenados durante el régimen de excepción con penas de cárcel que van desde los dos hasta los doce años.

HRW ha puesto el foco también en las condiciones a las que se ven sometidos los menores en prisión, pues considera que las autoridades salvadoreñas "han tomado pocas medidas, si es que alguna", para proteger a los menores de la violencia de otros presos. Se han registrado palizas y agresiones sexuales en prisión.

"Durante años, los centros de detención juveniles en El Salvador han presentado condiciones graves: hacinamiento, escasez de personal, insalubridad y falta de infraestructura adecuada. Esta situación ha generado un entorno peligroso y deshumanizador que no solo no prioriza el bienestar de los menores, sino que obstaculiza severamente cualquier posibilidad real de rehabilitación y reinserción social", ha explicado la organización.

Es por todo esto que Goebertus ha hecho un llamamiento tanto a las autoridades locales para que detengan la detención indiscriminada de menores para evitar "perpetuar los ciclos de violencia"; como a la comunidad internacional, a la que apela para que exhorte a El Salvador para que cese "las violaciones de Derechos Humanos" y proteja "la vida y el futuro de la niñez".