MADRID, 27 Nov. (Notimérica) -
Si eres de los que persigue un pavo perfecto, estás harto de que tus familiares examinen lo que cocinas como si hiceran una autopsia o crees que Gordon Ramsay es un ser de otro planeta, te interesan estos consejos.
Hay muchos fallos por los que puedes fastidiar el plato por excelencia de Acción de Gracias. Nosotros te damos las claves para que este año no caigas en ninguno.
1. ¿CÓMO SABER SI MI PAVO ESTÁ HECHO?
Aquel dicho de que 'las cosas no son como parecen' también es válido para el pavo. Para encontrar el momento perfecto en que el plato está hecho, debemos fijarnos en la temperatura no en el aspecto exterior.
Utiliza un termómetro de carne en la zona donde el muslo y el pecho del animal se unen. Tiene que marcar 160 grados F cuando lo sacamos del horno, y 165 grados F después de dejarlo reposar.
También puedes hacer una incisión en esta zona del pavo, y si el líquido sale limpio y no con sangre significa que está hecho. Por otro lado, hay que tener en cuenta que el tiempo de cocción varía en función del tamaño del ave.
2. EVITA UN PAVO SECO Y SIN SABOR
El pavo al descongelarse pierde mucha de su humedad. Usa agua sazonada con sal, hierbas y otras especias tanto para hidratar al pollo como para darle sabor. Deja el pavo sumergido en un recipiente con este agua sazonada durante toda la noche para conseguir un pavo perfecto, eso sí asegúrate de eliminar el líquido sobrante antes de empezar a cocinarlo.
3. DESCONGELAR EL PAVO
El tiempo que vas a tardar en descongelar el pavo depende del tamaño del animal. Si está en torno a los 2 kilos tendremos que descongelarlo en el frigorífico al menos 24 horas antes de cocinarlo. Pero si hablamos de un pavo grande, de unos cinco kilos, tendremos que invertir tres días.
4. NO ESTÁ DORADO Y CRUJIENTE
Para evitar que el pavo se quede blanco y fofo, podemos cubrir al animal antes de cocinarlo con mantequilla o con aceite de oliva. Esto hará que el pavo adquiera un tono dorado y consigamos que su piel esté mucho más crujiente.
5. LA LÍNEA ENTRE LO POCO HECHO Y LO QUEMADO
El papel de aluminio es tu aliado número uno para luchar contra un pavo que se cuece de forma desigual, que está poco hecho o que se nos ha pasado.
Si el pavo está poco hecho tendremos que cubrirlo con papel de aluminio durante 1-20 minutos, si es un pájaro pequeño y de 20 a 30 minutos, si el tamaño es mayor. Este período de reposo hará que los jugos del pavo se redistribuyan en el animal.
Para el caso contrario, que nuestro pavo se acerca peligrosamente a estar quemado también podemos recurrir al papel de aluminio porque redirigirá el calor.
Otro método consiste en asar el ave al revés (con la pechuga hacia abajo) para la primera mitad del tiempo de cocción y luego darle la vuelta sobre su espalda para terminarlo de asar.
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