MADRID, 23 Ene. (Notimérica) -
La pobreza infantil ha alcanzado a 69 millones de niños de los cuales 27 millones se encuentran en condiciones extremas, siendo éste el principal desafío de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Oficina Regional del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en el 25 Aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño.
Ambas organizaciones representan en el documento titulado 'América Latina a 25 años de la aprobación de la Convención sobre los Derechos del Niño', tras la firma el 20 de noviembre de 1989 del compromiso universal a proteger y promover los derechos de los niños con políticas públicas, una selección de los derechos planteados en la Convención y un balance sobre los logros alcanzados y retos que tiene esta región en los temas de infancia y adolescencia.
Una de las principales deudas pendientes con la infancia latinoamericana y caribeña es la incidencia de la pobreza multidimensional que ha alcanzado a 69 millones de niños y adolescentes, encontrándose en una situación de extrema pobreza de 27 millones, según los últimos datos que corresponden al año 2012.
Entre el 2000 y 2012, todos los países de América Latina analizados anotaron un descenso del porcentaje de los menores de 18 años en pobreza. Esta pobreza total se ha reducido 15,2 puntos porcentuales (55,3 por ciento al 40,1 por ciento) y la extrema disminuyó 12,6 puntos porcentuales (27,2 por ciento al 15,6% por ciento).
Los países más afectados por la extrema desigualdad social han sido: Guatemala con un 42,2 por ciento, sobre un 79,9 de niños en condición de pobreza moderada; Nicaragua con un 42,7 por ciento, sobre un 78,8 de niños en condición de pobreza moderada; y Bolivia con un 42,4 por ciento, sobre un 70 por ciento de niños en condición de pobreza moderada.
Por contra, las regiones menos afectadas por la pobreza total han sido: Uruguay con un 3,6 por ciento, sobre el 17,4 de niños en condición de pobreza moderada; Chile con un 3,9 por ciento, sobre 15,7 de niños en condición de pobreza moderada; y Ecuador con un 4,5 por ciento, sobre 24,4 de niños en condición de pobreza moderada.
Asimismo, la proporción de niños y adolescente que viven en estas situaciones es significativamente superior en las zonas rurales donde afecta a un 75,5 por ciento, frente a la desarrollada en las zonas urbanas, donde asola a un 28,3 por ciento.
La pobreza infantil se concibe por la presencia de privaciones, al menos moderadas, en el ejercicio de por lo menos uno de los derechos constitutivos de pobreza infantil: saneamiento, acceso a agua potable, calidad de la vivienda, integración al sistema escolar, acceso a medios de información o buena alimentación. Si al menos una privación es grave, se los califica en situación de extrema
pobreza infantil.
En las últimas dos décadas, prácticamente todos los países de América Latina han impulsado programas de transferencias monetarias o condicionadas (PTC) para la reducción de pobreza.
Actualmente, funcionan 25 programas de transferencias monetarias que envían recursos a las familias en 20 países de la región, que se encuentran en condiciones vulnerables o en situaciones de pobreza o en indigencia por ingresos.