ROMA, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
Más de 80 líderes religiosos, representantes de todos los credos, incluido el Papa Francisco, participantes en el VII Congreso de Líderes de las religiones mundiales y tradicionales de Kazajistán, han hecho un llamamiento para que la política abandone "toda retórica agresiva" a nivel global y para que "cesen los conflictos" en el planeta.
"Hacemos un llamado a los líderes mundiales para que abandonen toda retórica agresiva y destructiva que conduce a la desestabilización del mundo, y que cesen los conflictos y el derramamiento de sangre en todos los rincones de nuestro mundo", han señalado en una declaración conjunta desde la capital kazaja Nur-Sultán.
Con el documento, que será distribuido en la próxima asamblea de las Naciones Unidas, hacen un llamamiento "a los líderes religiosos y figuras políticas prominentes de diferentes partes del mundo a desarrollar incansablemente el diálogo en nombre de la amistad, la solidaridad y la convivencia pacífica".
Además, expresan su "grave preocupación por el aumento mundial del número de migrantes y refugiados que necesitan asistencia humanitaria y protección".
En el texto, los firmantes condenan "en los términos más enérgicos el extremismo, el radicalismo y el terrorismo que conducen a la persecución religiosa y al socavamiento de la vida y la dignidad humanas", así como "la creación de focos de tensión entre los Estados y a nivel internacional en el mundo".
"Abogamos por la participación activa de los líderes de las religiones mundiales y tradicionales y figuras políticas destacadas en el proceso de resolución de conflictos para lograr la estabilidad a largo plazo", añaden.
Se trata de un texto de 35 cláusulas que ha sido firmado por representantes cristianos, musulmanes, judíos, budistas, hinduistas y de organizaciones internacionales como las Naciones Unidas.
En el mismo se deja claro "que el extremismo, el radicalismo, el terrorismo y todas las demás formas de violencia y guerras, sean cuales sean sus objetivos, no tienen nada que ver con la verdadera religión y deben ser rechazados en los términos más enérgicos posibles".
Si bien el documento no hace ninguna referencia explícita al conflicto en Ucrania, sí se han solidarizado "con los esfuerzos de las Naciones Unidas y todas las demás instituciones y organizaciones internacionales, gubernamentales y regionales, para promover el diálogo entre civilizaciones y religiones, estados y naciones".
Entre los participantes del encuentro se encontraban, entre otros, el Gran Imán de Al-Azhar, Ahmed al-Tayyeb, y el Gran Rabino de Israel, David Lau, además de una delegación de la Iglesia ortodoxa rusa cercana a Vladimir Putin, aunque no participó el Patriarca Kiril.