MADRID 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
Más de 4,8 millones de toneladas de residuos de plástico entran en los océanos desde cada año y esa cifra puede llegar a los 12,7 millones de toneladas métricas. Se trata de una magnitud de una a tres órdenes mayor que la masa de plástico que flota en los océanos.
Las corrientes oceánicas han estado llevando escombros flotantes en los cinco grandes giros oceánicos del mundo durante décadas. Las corrientes giratorias de estos llamados "parches de basura" crean vórtices de basura, en gran parte de plástico, pero hasta ahora ha sido un misterio la cantidad exacta de plástico que se abre camino hasta los océanos del mundo y de dónde procede.
El nuevo trabajo, cuyos resultados se publican este jueves en la revista 'Science', cuantifica la entrada de residuos plásticos de la tierra al océano y ofrece una hoja de ruta para desarrollar soluciones a escala del océano al problema de la contaminación marina de plástico.
La investigación fue realizada por un grupo de trabajo científico en el Centro Nacional de Análisis y Síntesis Ecológicos (NCEAS, por sus siglas en inglés) de la Universidad de California-Santa Bárbara (UCSB), en California, Estados Unidos, con el apoyo de Conservación Oceánica, con sede en Washington. Para realizar el trabajo, la autora principal, Jenna Jambeck, ingeniera ambiental de la Universidad de Georgia, coordinó las contribuciones de expertos en oceanografía, gestión de residuos y ciencia de materiales plásticos.
"Usando la densidad media de los residuos de plástico sin compactar, ocho millones de toneladas métricas --el punto medio de nuestra estimación-- cubriría un área 34 veces el tamaño de Manhattan con residuos de plásticos hasta los tobillos", detalla el coautor Roland Geyer, profesor en Escuela Bren de Ciencias y Gestión Ambiental de la UCSB. "Ocho millones de toneladas métricas es una gran cantidad de material para cualquier medida. Es la cantidad de plástico que se produjo en todo el mundo en 1961", destaca.
Estudios previos han documentado el impacto de los desechos de plástico en más de 660 especies marinas, desde el más pequeño de zooplancton a las mayores ballenas, incluyendo el marisco destinado al mercado de pescado, pero ninguno ha cuantificado la cantidad de todo el mundo que entra en el mar desde la tierra. "Ésta es la primera vez que se han conectado los puntos de manera cuantificable", dice Jambeck.
SOLUCIÓN: MEJORAR LA GESTIÓN DE LOS RESIDUOS Y EL RECICLAJE
Según el estudio, los países con fronteras costeras, 192 en total, descargan plástico en los océanos del mundo con las mayores cantidades estimadas procedentes de un número relativamente pequeño de países de ingresos medios en rápido desarrollo. De hecho, los científicos encontraron que los 20 países representaron el 83 por ciento de los residuos de plástico mal administrados disponibles para entrar en el océano. Estos expertos apuntan que la reducción de la cantidad de estos residuos en un 50 por ciento se traduciría en una disminución de casi el 40 por ciento en las entradas de plástico en el océano.
"La retirada a gran escala de los desechos marinos de plástico no va a ser rentable y muy probablemente simplemente inviable --subraya Geyer--. Esto significa que tenemos que evitar que el plástico entre en los océanos, en primer lugar a través de una mejor gestión de los residuos, más reutilización y reciclaje de más, mejor diseño de los productos y la sustitución de materiales".
Millones de toneladas métricas llegan a los océanos, pero los investigadores están encontrando entre 6.350 y 245.000 toneladas métricas que flotan en la superficie, una mera parte del total. "Ahora mismo, estamos midiendo principalmente el plástico que flota --explica la coautora del estudio Kara Lavender Law, profesora de Investigación de la Asociación de Educación del Mar con sede en Massachusetts, Estados Unidos--. Hay una gran cantidad de plástico que se asienta en el fondo del océano y en las playas de todo el mundo".
El grupo de trabajo NCEAS prevé que el impacto acumulativo de los océanos podría llegar a 155 millones de toneladas métricas en el año 2025. Sin embargo, el planeta no alcanzará "picos globales de residuos" antes de 2100, según los cálculos del Banco Mundial. "Estamos siendo abrumados por nuestros residuos", alerta Jambeck.
"Las cifras son alarmantes, pero como señala el equipo, el problema no es insuperable", afirma el director de NCEAS, Frank Davis, quien también es profesor de la Escuela Bren de la UCSB. "Los investigadores sugieren soluciones viables que podrían revertir la alarmante tendencia de los plásticos que se vierten en los océanos", añade.
Entre ellos, según el estudio, están la reducción de residuos y las estrategias de gestión de residuos "aguas abajo", como un aumento de los sistemas de recuperación y una ampliación de la responsabilidad del productor. Según los científicos, mientras que se construyan infraestructuras en las naciones en desarrollo, los países industrializados pueden realizar acciones inmediata en la reducción de residuos y frenar el crecimiento de plásticos de un solo uso.