MADRID, 20 Jul. (Notimérica) -
Una madre británica, Melanie Williams, ha conmovido a los usuarios de la red social Facebook gracias a sus emotivas declaraciones sobre lo que supone tener cáncer de piel, una enfermedad común que se ha convertido en una de las principales causas de muerte entre las mujeres de 20 a 30 años.
Con el objetivo de que todo el mundo reflexione sobre la enfermedad y se incrementen las precauciones, Williams expone su caso y señala que un diagnóstico temprano puede mejorar la situación.
"¿Ven lo que hay en mi dedo pulgar? ¿Saben lo que es? Es cáncer de piel y creció de la nada en cuestión de semanas", señaló a través de un mensaje en Facebook.
Williams, que desconocía los síntomas de esta enfermedad, interpretó que las manchas oscuras que habían surgido en una de sus uñas estaban causadas por algún tipo de hongo o de verruga, no obstante, los médicos le diagnosticaron cáncer de piel.
Aunque las causas son variadas, al igual que el diagnóstico y el tratamiento, una exposición prolongada al sol o a las lámparas de bronceado parecen ser las principales culpables de este tipo de cáncer.
La joven británica tuvo suerte, ya que gracias a que acudió a un especialista, el cáncer será eliminado de su piel en las próximas semanas. No obstante, también perderá parte de su dedo pulgar, para evitar una posible propagación de la enfermedad.
"No quiero su empatía, sino despertar conciencia al respecto. Por favor, debéis ir a que revisen cualquier cambio que aparezca en vuestra piel", comentó Williams.
Los diferentes tipos de cáncer de piel, el melanoma y carcinoma, acaban cada año con la vida de miles de hombres y mujeres, con especial incidencia en algunas zonas de África, Australia y Estados Unidos.
¿CÓMO DETECTAR LA ENFERMEDAD?
Los expertos señalan que detectar algunos de los indicios de esta enfermedad es relativamente fácil. Lo más importante es revisar las manchas de la piel con regularidad, en busca de algunas nuevas o que cambien de tamaño.
En muchas personas, la presencia de lunares es algo frecuente, no obstante, es importante controlar su número, tamaño, color y diámetro.
Los lunares de gran tamaño (más de 6 milímetros) o de borde irregular deben ser revisados por un médico. Al igual que aquellos que hayan cambiado de color durante los últimos meses.
Además, los médicos recomiendan el uso de protector solar y una exposición al sol controlada.