BOGOTÁ, 26 Jul. (Notimérica) -
El narcotraficante Daniel Barrera, alias 'El loco Barrera' ha sido condenado por el Tribunal del distrito de Nueva York, en Estados Unidos, a 35 años de prisión, de los que ya ha cumplido tres.
'El loco Barrera', uno de los jefes más importantes de las Bandas Criminales Emergentes al Servicio del Narcotráfico (Bacrim), fue detenido en 2012 en el municipio venezolano de San Cristóbal, ubicado en el estado de Táchira (noroeste) en un operativo de seguridad en el que participaron fuerzas colombianas, venezolanas, estadounidenses y británicas.
En realidad, a Barrera se le otorga el título de narcoparamilitar, en referencia al movimiento narcoparamilitarismo que reemplazó del todo al paramilitarismo y narcotráfico en Colombia a partir del año 2006.
Hasta la fecha de su captura, 'El loco Barrera' se hizo con una amplia red de colaboradores, desde exparamilitares hasta guerrilleros, para mover cocaína de los Llanos Orientales de Colombia a Estados Unidos y Europa, según el Centro de Investigación de Crimen Organizado.
La carrera criminal de Barrera comenzó en los años ochenta en Guavire, su tierra natal, donde él y su hermano Omar suministraban precursores químicos a los laboratorios de procesamiento de base de coca para transformarla en clorhidrato de cocaína. Fue tras el asesinato de Omar que las represalias de Barrera hacia los asesinos, le otorgarían el apodo de 'El Loco'.
En 1990 fue arrestado por las autoridades colombianas, aunque logró escapar poco después y resurgir como traficante. Barrera volvió a comprar cocaína semiprocesada a varias fuentes, incluyendo a los comandantes de los Frentes 10,14,16 y 17 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y la vendía a clientes que operaban bajo el amparo del entonces poderoso Cartel del Norte del Valle (CNDV).
Pero Barrera no estaba satisfecho con su papel de intermediario, por lo que realizó una serie de alianzas que lo posicionaron como uno de los grandes narcotraficantes colombianos durante la década de los 2000 junto al comandante Manuel Jesus Pirabán, alias 'Jorge Pirata' y el exsicario Pedro Oliveiro Guerrero, alias 'Cuchillo'. En septiembre de 2004, los tres organizaron la emboscada y el posterior asesinato del comandante de los paramilitares del Bloque Centauros, José Miguel Arroyave.
La expansión de Barrera continuó durante 2008 de la mano de Luis Enrique Calle Serna, alias 'Comba' y Diego Pérez Henao, alias 'Diego Rastrojo', con quienes planeó el asesinato de uno de los grandes líderes de CNDV, Alirio Varela. Con esta acción, el colombiano compraría las rutas del norte y convencería a la seguridad local de Venezuela que le brindaron acceso y control sobre las rutas del narcotráfico desde el Oceáno Pacífico hasta los llanos del país, selvas brasileñas y costa caribeña.
El historial criminal de Barrera le dio los medios necesarios para sobrevivir un largo tiempo, mientras otros grandes narcotraficantes eran capturados o abatidos, como el 'Cuchillo' u otro de sus compañeros, Julio Alberto Lozano, alias 'Lucho'. Los contactos de Barrera con la clase dirigente de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colomba (FARC), le permitieron manejar su negocio y movilizar sus fuerzas en contra de sus enemigos.
En marzo de 2011, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos lo denominó uno de los narcotraficantes más grandes de Colombia y en el momento de su captura en 2012 estaba siendo investigado por las autoridades colombianas por tráfico de drogas, lavado de dinero y homicidio.
Dos años después de su arresto, Barrera se declaró culpable en una corte de Estados Unidos por conspiración para lavar decenas de millones de dólares en ganancias de la droga, por lo que fue extraditado en un avión para responder por sus delitos en la corte de Nueva York.
La condena de Barrera, decidida finalmente este martes, se considera una de las más severas acordadas contra narcotraficantes procedentes de Colombia, a la que solo supera la cadena perpetua de Carlos Ledher y la sentencia de 45 años de Diego Montoya, alias 'Don Diego'.