SANTIAGO, 26 May. (Notimérica) -
Esta paradisíaca isla chilena de 163 kilómetros cuadrados se ubica en el Océano Pacífico Sur en el extremo oriental llamado Triángulo de Polinesia. 3.526 kilómetros la separan de la frontera Chilena. El proceso de colonización europeo transformó las costumbres de la población 'rapanui', autóctona de la isla, y convirtió la isla en una cárcel para sus propios habitantes.
En 1888, 'Rapa Nui' (nombre indígena de la isla) pasó a formar parte de Chile pero tras el fracaso del Gobierno chileno ante los intentos colonizadores arrendó la isla, a partir de 1895 y durante casi 60 años, a la compañía inglesa "Compañía Explotadora de la Isla de Pascua". Esto conllevó una serie de procesos de transformación en la población indígena.
La población 'rapanui' llegó a estar constituida hasta por 14.000 personas sin embargo, tras la llegada de expediciones esclavistas, misiones católicas así como el desarrollo de epidemias sólo quedaron alrededor de 110 habitantes nativos en el siglo XIX.
En ese sentido la isla se convirtió en una cárcel para sus habitantes ya que los 'rapanui' no obtuvieron la ciudadanía chilena hasta 1966 cuando la isla pasó a formar parte del antiguo Departamento de Valparaíso.
A día de hoy existe un centro penitenciario, a la que se le ha calificado como la cárcel más pacífica del mundo, en la que los turistas pueden acceder a comprar las artesanías que hacen los presos. "La vida dentro de la cárcel es feliz. Nadie quiere fugarse porque no hay a dónde ir y porque aquí comemos carne todos los días", aseguró un preso al periódico 'La Tercera'.
"La realidad de la isla no es exactamente como dicen los medios. Nuestra cárcel tiene muros pero son de mallas de acero porque culturalmente no estamos acostumbrados a tener muros de cemento", explica la gobernadora de Isla de Pascua, Carlina Hotu Hey, al periódico 'BBC Mundo'.
De esa época todavía imperan costumbres del pueblo indígena y los dueños de las tierras siguen siendo los 'rapanui' ya que están amparados por la ley indígena de 1933 que prohíbe que extranjeros y chilenos continentales (los que no pertenecen a la etnia) puedan adquirirlas.
En la actualidad, la Isla de Pascua es un atractivo turístico a nivel mundial y según el último censo tiene 5.035 habitantes. "Hoy 'Rapa Nui' goza de tranquilidad y paz social. Se concentran los esfuerzos en la protección del medio ambiente, la educación y otros aspectos del fortalecimiento de nuestro cultura", asegura la gobernadora.