MÉXICO DF, 25 Ene. (Notimérica) -
Los autores materiales de la desaparición de los 43 'normalistas' de Ayotzinapa, el lugar en el que se perpetró esta matanza y el método utilizado para eliminar cualquier rastro, continúan siendo una incógnita cuatro meses después de que se realizara esta desaparición.
Fue el 26 de septiembre, hace este lunes cuatro meses, cuando, por última vez fueron vistos con vida 43 alumnos de magisterio de la Normal Rural 'Raúl Isidro Burgos' de Ayotzinapa, en el estado de Guerrero, al sur del país. Una fecha en la que también se produjo la muerte de tres estudiantes de esta escuela y de otros tres civiles, después de que la Policía Municipal de Iguala disparase contra el autobús en el que viajaban los 'normalistas' y por equivocación contra el que usaba un equipo de fútbol de la localidad.
Un suceso que, como muchos otros, podría haber pasado inadvertido - en México hay 23.000 desaparecidos-- pero que, sin embargo, conmocionó al mundo, indignó al pueblo mexicano y despertó a la sociedad, harta de la impunidad y la violencia que se vive en este país desde hace décadas.
Según varias ONG, se trata de la mayor crisis de Derechos Humanos que vive el país desde la matanza de Tlatelolco en 1968, cuando un grupo paramilitar disparó a sangre fría contra cientos de estudiantes, y es probable que sea el acontecimiento que marcará el sexenio del actual presidente de México, Enrique Peña Nieto.
A pesar de todo ello y de que han pasado cuatro meses desde que se perpetrara la desaparición, quedan todavía grandes incógnitas por resolver. De hecho, continúan apareciendo testimonios e investigaciones periodísticas que señalan a nuevos culpables de esta matanza. El último en ser señalado ha sido el Ejército, ya que se considera que pudo intervenir, acompañado de organizaciones dedicadas al narcotráfico, en la desaparición de los 43 'normalistas' de Ayotzinapa.
Son muchos, quienes señalan directamente al Estado en la desaparición de estos estudiantes, o al menos, se considera que, en los primeros momentos, el Gobierno no hizo todo lo posible por averiguar el paradero de los alumnos de la Normal Rural 'Raúl Isidro Burgos', una escuela especialmente combativa, de la que han surgido guerrilleros como Lucio Cabañas Barreiro y Genaro Vázquez Rojas.
Así al menos lo expresaron los forenses argentinos que, llamados por los familiares de los 43 desaparecidos, investigan el paradero de los estudiantes. Éstos aseguraron que durante los primero días de búsqueda se les impidió el acceso a ciertas zonas y se encontraron con impedimentos para realizar su trabajo.
Mientras tanto, se descubría que fue el entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca, junto a su esposa, María de los Ángeles Pineda, quien dio la orden de hacer desaparecer a los estudiantes, ante el temor a que boicotearan el acto de se mujer, que aspiraba a postularse como la candidata a ocupar la Alcaldía, tras el mandato de su marido.
Las investigaciones periodísticas también ponían de manifiesto la intromisión del crimen organizado en la Alcaldía de este municipio, al descubrir la estrecha relación del presidente municipal y su esposa con el narcotráfico. De hecho, los padres de María de los Ángeles Pineda habían sido detenidos por su pertenencia al clan de los Beltrán Leyva, y sus hermanos fueron asesinados, se cree por pertenecer a esta misma organización.
A pesar de que la que era conocida como la pareja imperial fue detenida el pasado 4 de noviembre, la sociedad continúo protagonizando multitudianarias manifestaciones, y es que era, cada vez más evidente que el narcotráfico había sido capaz de suplantar al Estado en varios municipios más. Así lo atestiguaron las investigaciones gubernamentales meses después, al sostener que en los cuerpos policiales de otras 13 ciudades más del estado de Guerrero había una clara intromisión del crimen organizado.
Además, este miércoles el Ejecutivo de Peña Nieto aseguraba que el 75 por ciento de los municipios del país eran vulnerables a la intromisión del narcotráfico y salían a la luz varios casos, en los que distintos cárteles llegaban a nombrar la dirección de distintas policías municipales.
Sin duda, la desaparición de los 43 'normalistas' de Ayotzinapa ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad del Estado ante el crimen organizado. Se trata de organizaciones capaces de ocupar alcaldías, dirigir policías, hacer desaparecer con impunidad decenas de personas y, sobre todo, capaces de imponer el miedo y el terror sobre una población harta de la impunidad que se da en el país.
ACTUALIZACIÓN: 26 DE MARZO
Seis meses después, los estudiantes siguen sin aparecer y el cruce de acusaciones entre el Gobierno, los familiares de los 'normalistas', las organizaciones internacionales y los investigadores forenses no cesa. Aquí un gráfico interactivo sobre la cronología completa del Caso Iguala hasta la fecha.