SANTIAGO, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
El fiscal de Copiapó, Héctor Mella, ha tomado declaración a Luis Urzúa, el jefe de turno de los 33 mineros que durante más de dos meses permanecieron atrapados en el yacimiento San José, norte de Chile, iniciando así la investigación del accidente.
El representante del Ministerio Público indicó que en los próximos días serán citados para declarar el resto de los mineros afectados por el derrumbe de la mina. Además, serán sometidos a un examen de medicina legal con el fin de determinar los efectos que el accidente ha tenido en su salud y tenerlos en cuenta para la determinación de las indemnizaciones.
"A partir de hoy vamos a interrogar a los mineros. Por de pronto, además de tomar declaraciones nosotros vamos a enviar a los mineros al Servicio Médico Legal con la finalidad de constatar fehacientemente su estado y confirmar que no tienen lesiones atribuibles al derrumbe o si efectivamente las tuvieron en algún momento", dijo Mella en declaraciones al diario 'La Tercera'.
Estas actuaciones se enmarcan en la investigación que la Fiscalía llevará a cabo para determinar cuáles fueron las causas del derrumbe y las implicaciones legales que éstas podrían tener para sus propietarios, quienes han sido denunciados por un delito de homicidio frustrado por la mayoría de los mineros.
"Hay una querella que está pendiente y respecto a la cual también nosotros nos tenemos que pronunciar (...) para ese efecto esperamos contar con la mayor cantidad de información posible y uno de esos antecedentes relevantes tiene que ver con la situación y el origen del derrumbe", aclaró.