Actualizado 31/12/2018 12:48

¿Por qué se comen 12 uvas para recibir el año nuevo?

Uvas blancas.
XUNTA - Archivo

   MADRID, 31 Dic. (Notimerica) -

   Una de las tradiciones más emblemáticas de los españoles es la de dar la bievenida al nuevo año comiendo 12 uvas. Se trata de una costumbre que, dada su longevidad, ha acabado llegando a otros países de Iberoamérica de la mano de todos los españoles que han viajado con esta tradición en su maleta.

   Así, españoles, hijos y familiares de españoes y latinos de la región --en especial en Argentina, Perú, Colombia, México, Venezuela, Chile o Ecuador-- compran esta fruta para la noche de Nochevieja, comiendo una uva por cada una de las 12 campanadas que cierrar y abren el nuevo año. Pero, ¿cuál es el origen de esta costumbre? ¿Por qué se comen 12 uvas para recibir el nuevo año?

   Los primeros escritos y notas sobre esta costumbre aparecen en 1894, cuando el diario español 'El Imparcial' contaba que las clases más acomodadas de la época en Madrid habían empezado a imitar la costumbre de comer uvas y beber champán en Nochevieja, una idea "importada de Francia, pero que ha adquirido entre nostros carta de naturaleza".

   Por otro lado, el 1 de enero de 1896, el diario 'La Correspondencia de España' contaba que en la residencia del presidente del Consejo de Ministros, el general Martínez Campos, "saludaron los ministros la llegada del nuevo año comiento ricas uvas y bebiendo champagne", al tiempo que brindando por el ejército que "tan valientemente pelea en Cuba".

   Pero en 1882, cuando el alcalde de Madrid, José Abascal, decidió cortar una de las calles principales durante la Recepción de los Reyes Magos, el 5 de diciembre de aquel año, costando la entrada a dicha avenida 1 duro, los ciudadanos trataron de desplantar a aquellas clases burguesas organizando un acto en la Puerta del Sol de Madrid e imitando a los más ricos comiendo uvas con el sonido del reloj.

   Así, este acto burlesco de protesta adquirió notoriedad y se perpetuó con los años, expandiéndose al resto de España. Aunque fue sobre todo los grandes excedentes de uva de los viticultores de Alicante y Murcia en el año 1909 lo que hacieron que se afianzara la costumbre. Aquel año se organizó una campaña que animaba a todos los españoles a comer uvas con cada una de las campanadas, y desde entonces, hasta el día de hoy.