LA PAZ, 3 Mar. (Notimérica) -
El Camino de la Muerte, la antigua vía para acceder a la región de los Yungas construida en los años 30 por prisioneros paraguayos capturados en la guerra del Chaco, es la carretera más peligrosa del mundo. Los 80 km que unen La Paz con los Yungas registran cada año más de 200 accidentes y 100 muertes. Por eso, en 1995 el Banco Interamericano de Desarrollo lo bautizó como el camino más peligroso del mundo, título que ha atraído a miles de viajeros que no le temen a la muerte.
El ancho de su carril es de tan solo tres metros y la falta de guardarraíles o quitamiedos hace que muchos de los nativos no se arriesguen a atravesar una de las pocas rutas que conectan la selva amazónica del norte del país con la urbe paceña.
¿Lo peor? Sus más de 3.600 metros de desnivel en 64 kilómetros que han provocado un cambio en la regulación vial del país ya que es el único lugar en el que está permitido circular pegado a la izquierda, de la misma forma que se hace en Australia o Reino Unido.
Su trazado retorcido e imposible (conocido como la "venganza de los prisioneros paraguayos" que fueron capturados por las tropas bolivianas y esclavizados) se complica por las condiciones climáticas imprevisibles, repletas de lluvias torrenciales y espesos bancos de niebla, lo que provoca desprendimientos de piedras y cascadas en medio del trayecto, lo que dificulta su tránsito.
Su peligrosidad se debe, además, por el gran tráfico de camiones y vehículos de alto tonelaje que se dirigen a La Paz cargados, sobre todo, de productos agrícolas o cítricos además del transporte de pasajeros.
Desde la década de los 90 hasta la actualidad, este tramo supone un reclamo turístico para los entusiastas de la bicicleta de montaña por sus descensos pronunciados y la maravilla de su paisaje rico en fauna y flora.
Por eso, un gran número de guías turísticas promocionan esta arriesgada excursión desde La Paz en un tour para los más atrevidos que tal vez no son conscientes de que el 24 de julio de 1983, un autobús se precipitó al cañón muriendo más de 100 pasajeros en el peor accidente vial de la historia de Bolivia.