MADRID, 6 Ene. (Notimérica) -
La cifra es escalofriante: cada año se suman más de tres millones y medio de personas obesas en América Latina y el Caribe. La región seguirá afrontando y luchando contra los dos males que persiten: la desnutrición y la obesidad.
Una nutrición adecuada contribuye de manera fundamental a la realización del derecho al disfrute del más alto nivel posible de salud física y mental de niños y niñas, según afirma la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Por el contrario, la malnutrición, que incluye la desnutrición aguda, global y crónica y el sobrepeso y la obesidad, tiene diversas causas y consecuencias. En términos generales, aun cuando en la región los niveles de desnutrición se han reducido a más de la mitad desde 1990, en muchos países persisten altos niveles de desnutrición y anemia y los promedios nacionales suelen esconder grandes diferencias geográficas o entre grupos poblacionales según el nivel educacional, los ingresos o la pertenencia étnica.
Además, la región se ve afectada por un creciente nivel de sobrepeso y obesidad en niños, niñas y adolescentes.
MUCHA COMIDA, MUCHA POBREZA
Parece contradictorio que una región que cuenta con una oferta excedentaria de alimentos para el consumo humano haya gente muriendo de hambre o malnutrida.
En 2017, se estimaba que el 10,2% de la población no contaba con ingresos suficientes para cubrir su requerimientos nutricionales mínimos, 12,2% de los menores de cinco años tenían desnutrición crónica, 3,8% sufría desnutrición global y aún 1,6% de desnutrición aguda.
Según la ONU, la malnutrición es un problema de primer orden para romper la reproducción del círculo vicioso de la pobreza porque afectan de forma directa sobre la salud, educación y economía de las personas. El cambio demográfico, la migración, los cambios en hábitos y patrones de consumo, la creciente urbanización, sumado a los efectos del cambio climático presentan nuevos desafíos que urgen ser enfrentados por el creciente riesgo de la inseguridad alimentaria y nutricional.
PAÍSES DONDE MÁS AZOTA EL PROBLEMA
Desde 2014, Argentina, Bolivia y Venezuela vieron incrementos en su número de personas subalimentadas. El mayor aumento ocurrió en Venezuela: 600.000 personas más sólo entre 2014-2016 y 2015-2017.
Venezuela es hoy uno de los países con mayor número de personas subalimentadas en la región (3,7 millones, el 11,7% de su población), junto con Haití (cinco millones, el 45,7% de su población) y México (4,8 millones, 3,8% de su población).
¿POR QUÉ SE PRODUCE?
La ONU indica que una de las principales causas del alza de la malnutrición en los grupos de población especialmente vulnerables son los cambios que han sufrido los sistemas alimentarios de la región -el ciclo de los alimentos desde su producción hasta su consumo.
Otro de los factores que acrecenta el problema es la desigualdad económica y social en la región, algo que está íntimamente relacionado con la desnutrición crónica infantil.
PREVENCIÓN
Con el fin de avanzar hacia las metas de la Agenda 2030 y erradicar el hambre, así como reducir la malnutrición, es necesario avanzar en el diseño e implementación de políticas integrales y multisectoriales.
Las experiencias más exitosas en el combate contra la malnutrición incluyen el desarrollo de trabajo conjunto entre distintos actores, no solo desde la perspectiva de salud sino tomando en consideración todas las dimensiones del problema nutricional, asegura Cepal.