Brasilia, 21 Nov. (Notimérica) -
Después de 22 ediciones, este es el primer año que la celebración de la multitudinaria marcha del Orgullo Gay no recibe subvenciones municipales ni ningún tipo de ayuda pública. Además, el alcalde conservador de esta ciudad, un obispo evangélico muy crítico con la homosexualidad se negó a acudir a la marcha.
Este año la celebración se ha sostenido únicamente gracias a los patrocinadores privados, por lo que se ha tenido que reducir la infraestructura para los shows. Como respuesta a esta decisión tomada por el alcalde, Marcelo Crivella, grandes artistas brasileños, como la cantante Daniel Mercury, se ofrecieron voluntarios para animar la fiesta de forma totalmente gratuita.
La manifestación congregó a cientos de miles de personas y transcurrió en clima de fiesta pero sin dejar de reivindicar la resistencia y los derechos de los homosexuales. Los asistentes a la marcha protestaron también contra la actitud del alcalde, quien se negó a participar en cualquier cosa que tuviera que ver con esta fiesta, con gritos como "bésalo a él, bésala a ella, pero no beses a Crivella".
Brasil es uno de los países que más sufre la violencia homofóbica, pero gracias a su vibrante comunidad homosexual se deja oir y sigue luchando día a día por la igualdad de derechos y el respeto que esta comunidad merece.