MADRID, 3 Abr. (NOTIMÉRICA) -
El Día Mundial del Arcoíris se celebra cada 3 de abril y se trata de uno de los fenómenos naturales más curiosos y bonitos que aparece cuando la luz solar atraviesa las gotas de lluvia en un ángulo de 42 grados.
A pesar de que es muy habitual ver el arcoíris durante un día de lluvia y sol, puede que desconozcas ciertas curiosidades sobre este bonito fenómeno.
1. No se pueden ver todos los colores del arcoíris
El arcoíris cubre un espectro de colores que se extiende desde el rojo hasta el violeta. Dependiendo de las culturas se considera que existen entre tres y nueve colores. Aunque esto es solo lo que alcanza a ver el ojo humano ya que, en realidad, contiene una infinidad de colores.
2. El arcoíris rara vez aparece a medio día
Para que el arcoíris aparezca en el cielo se tienen que dar varias condiciones. Tiene que llover y hacer sol al mismo tiempo, pero también es necesario que el astro se encuentre a menos de 42 grados por encima del horizonte. Cuanto más bajo esté el sol, más visible será el arcoíris, por eso es poco frecuente que aparezca durante el mediodía.
3. Es imposible ver el fin del arcoíris
Puedes intentar llegar al final de este, moverte de ángulo o preguntar a quien se encuentre lejos de ti, pero resulta imposible ver el final o el principio del arcoíris. Esto se debe a que las radiaciones que forman este fenómeno dependen de la distancia y del ángulo al que se encuentre el observador, por lo que el arcoíris se mueve contigo.
4. Es posible hacer desaparecer el arcoíris
Si usas unas gafas polarizadas puedes hacerlo desaparecer ante tus ojos. Como su nombre indica, el tipo de cristal de estas gafas está creado para hacer desaparecer la luz 'polarizada', es decir, la luz que se refleja en las superficies horizontales y que es bastante deslumbrante.
5. Un arcoíris puede aparecer por la noche
A pesar de que este necesita la luz solar para aparecer, también puede mostrarse con la luna llena. Esta refleja los rayos solares que emiten o golpean las gotas de lluvia y dan paso a la aparición de un espectro luminoso al que se puede denominar 'arcoíris nocturno'.