MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Venezuela ha confirmado este viernes la muerte del estudiante Daniel Enrique Rodríguez Quevedo, de 18 años, quien había resultado herido este jueves en una protesta celebrada en el municipio de Córdoba, en el estado de Táchira.
El Ministerio Público ha indicado en un comunicado que ha comisionado a dos fiscales estatales para investigar la muerte del joven, que fue alcanzado por una bala en la cabeza la noche del jueves cuando "un grupo de motorizados" comenzó a disparar en el lugar donde se encontraba.
Rodríguez Quevedo fue trasladado al Hospital Central de San Cristóbal Doctor José María Vargas, donde falleció durante la madrugada del viernes.
Su madre, Marlene Quevedo, ha explicado a la emisora tachirense Ecos del Torbes que el joven, estudiante de Derecho, recibió el disparo junto a su propia vivienda, donde se encontraba con un grupo de amigos para asistir a una manifestación.
"Esas son personas que salen a matar, yo no sé quien las arma", ha lamentado, criticando que "no es el primero que matan".
En la víspera, otro joven, de 25 años, murió tras ser arrollado por una camioneta en la ciudad de Maracaibo, en el estado venezolano de Zulia, en el marco de las protestas que se desarrollan en todo el país desde hace mes y medio contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
Con la muerte de Rodríguez Quevedo y Moreno ya son 46 el total de fallecidos registrados desde que arrancaron las protestas.
La tensión política en Venezuela alcanzó un nuevo pico el pasado marzo, cuando el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) despojó de sus poderes a la Asamblea Nacional --controlada por la oposición desde 2016-- y dejó sin inmunidad parlamentaria a los diputados.
El Gobierno de Maduro ordenó dar marcha atrás en ambas decisiones, algo que el TSJ cumplió, pero la oposición y la Organización de Estados Americanos (OEA) consideran que se ha producido una "ruptura del orden constitucional" que requiere elecciones anticipadas.
Desde entonces, la Mesa de Unidad Democrática (MUD) no ha dejado de convocar manifestaciones que han acabado en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. De acuerdo con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, la dura represión de las protestas podría constituir un delito de lesa humanidad.
Maduro ha convocado una Asamblea Constituyente por considerar que es la única forma de devolver la paz a Venezuela. La MUD, por su parte, ha denunciado que de esta manera el 'chavismo' pretende consumar el "autogolpe" que comenzó con las polémicas sentencias del TSJ.
La Asamblea Constituyente estará formada por 500 "ciudadanos" que serán elegidos en las próximas semanas "a través del voto universal, directo y secreto", de los cuales la mitad, 250, saldrán de sectores de marcado corte oficialista, según ha detallado Maduro.