CARACAS, 20 Jul. (Reuters/Notimérica) -
Venezuela despidió este jueves a un miembro de alto rango de su misión en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), después de que acusara al Gobierno de Nicolás Maduro de cometer "crímenes de lesa humanidad" en el manejo de los casi cuatro meses de protestas opositoras.
Desde principios de abril, millones de venezolanos han salido a las calles de su país a protestar contra lo que consideran una "dictadura" que apresa disidentes y viola los derechos fundamentales. En medio de esos enfrentamientos han muerto casi 100 personas, según cifras oficiales.
"Rechazo categórica y contundentemente las declaraciones y posición asumida por el exfuncionario de nuestra misión en la ONU, Isaías Medina", escribió el embajador de la misión permanente de Venezuela ante la ONU, Rafael Ramírez, en Twitter.
"Condeno la conducta de Isaías Medina. Inmediatamente lo hemos relevado de sus funciones. No nos representa. Ha actuado de manera deshonesta", agregó.
Más temprano Medina, quien se desempeñaba como ministro consejero en la misión ante la ONU, criticó en un video subido en Youtube lo que calificó como "crímenes de lesa humanidad" y la "represión ilimitada" contra los jóvenes manifestantes que se enfrentan casi a diario con la fuerza pública.
"Venezuela es parte en el comité del Estatuto de Roma y este estatuto define muy claramente los crímenes contra la humanidad y el procesamiento sistemático de civiles, y esto ha estado ocurriendo durante mucho tiempo (en Venezuela)", dijo Medina desde la sede de Naciones Unidas en Nueva York.
"Mi país vive, en este momento, una represión ilimitada y persecución de la gente, en su mayoría jóvenes estudiantes (...) Es hora del cambio. La gente está pidiendo el cambio. Tenemos un serio problema humanitario, no hay comida", agregó.
Venezuela atraviesa la peor crisis de su historia contemporánea --con una inflación de tres dígitos, recesión económica y escasez de alimentos y medicinas-- por la que la oposición responsabiliza al presidente Nicolás Maduro.
El mandatario socialista de 54 años, por su parte, asegura que es víctima de una "guerra económica" llevada a cabo por la oposición que sólo busca desbancarlo antes de que culmine su período, a principios del 2019.