BERLÍN 23 Mar. (DPA/EP) -
El Gobierno alemán en funciones ha lamentado la orden de prisión preventiva dictada este domingo contra el suspendido alcalde de Estambul, Ekrem Imamoglu, como un golpe para la democracia en Turquía y exigido que el proceso judicial abierto contra el funcionario, uno de los grandes rivales políticos del presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, respete la ley en todo momento.
En una de las primeras reacciones europeas a la orden de prisión preventiva dictada esta mañana contra Imamoglu, acusado de corrupción, el Ministerio de Exteriores de Alemania pide que "la rivalidad política no se dirima en los tribunales ni en las cárceles".
Imamoglu fue detenido el pasado miércoles y llevaba desde entonces bajo custodia mientras, en el exterior, miles de personas han salido a las calles de las principales ciudades de todo el país para denunciar que el alcalde de Estambul, como él mismo asegura, ha sido víctima de una persecución política orquestada por el presidente Erdogan, quien ha negado cualquier tipo de maniobra y defendido la independencia de la Judicatura.
El Gobierno de Alemania, en este sentido, también pide que las alegaciones contra Imamoglu "sean investigadas con transparencia, tan rápido como sea posible, y que los procedimientos se desarrollen de acuerdo con el Estado de Derecho", ha hecho saber un portavoz.
CIENTOS DE PERSONAS PROTESTAN EN BERLÍN CONTRA EL ENCARCELAMIENTO
Mientras tanto, unas 1.300 personas han salido este domingo a las calles de Berlín para protestar por el encarcelamiento del suspendido alcalde con el comienzo de una marcha por el oeste de la capital alemana con carteles como "Juntos por una Turquía democrática" y "Queremos recuperar nuestra democracia".
La marcha, como la que congregó el miércoles por la noche a unas 200 personas en la Puerta de Brandeburgo, ha sido convocada por la filial alemana del CHP.