Sudán critica a Kenia por acoger una reunión de RSF y grupos aliados con el objetivo de formar un gobierno paralelo
MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Unión Africana (UA) ha denunciado este miércoles los "incesantes crímenes de guerra y contra la humanidad" en el marco de la guerra desatada en abril de 2023 entre el Ejército de Sudán y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), al tiempo que ha pedido una "tregua humanitaria" durante el mes de Ramadán, que arranca el 28 de febrero.
La UA ha expresado en un comunicado su "profunda preocupación por la continuada escalada del conflicto", particularmente por "los incesantes crímenes de guerra y contra la humanidad" y otras violaciones "graves" de los Derechos Humanos en el país africano.
Así, ha pedido a las partes en conflicto "un alto el fuego inmediato, permanente e incondicional" y su vuelta a las negociaciones, "seguido por un diálogo nacional inclusivo y una transición política", dado que "no hay una solución militar viable y sostenible a la guerra actual".
La UA ha lamentado también el "impacto adverso" de las hostilidades sobre la población y la situación en la región, al tiempo que ha criticado el cerco impuesto por las RSF sobre la ciudad de El Fasher, capital de la región de Darfur Norte (oeste), que está teniendo "un impacto devastador y a escala masiva" sobre los residentes.
Además, ha criticado "todo tipo de interferencia externa que está alimentando el conflicto" y ha reiterado su llamamiento a favor del fin de estas actitudes y que "todos los actores, incluidas entidades estatales y no estatales, cesen todo apoyo militar y financiero a las partes en conflicto".
El bloque ha reclamado además a las partes que garanticen un acceso humanitario "seguro y sin trabas" y la apertura de corredores humanitarios, al tiempo que ha insistido en la necesidad de dar paso a un diálogo político "inclusivo" encabezado por sudaneses como "única vía viable a una solución sostenible y de consenso a la crisis".
"Pedimos a todas las partes sudanesas que dejen de lado sus diferencias e intereses personales y se centren en el diálogo nacional, la reconciliación y la cohesión social como mejor opción para resolver la crisis en Sudán, en línea con los intereses supremos de Sudán y del pueblo sudanés", ha zanjado.
CRÍTICAS DE SUDÁN A KENIA
El comunicado de la UA ha sido publicado después de las críticas de Sudán a Kenia por acoger el martes una reunión por parte de una coalición alineada con las RSF con el objetivo de impulsar la creación de un gobierno paralelo al actual, si bien la decisión fue aplazada hasta este viernes.
El Ministerio de Exteriores sudanés ha publicado este miércoles un comunicado en su cuenta en la red social X en el que critica el "desprecio" de Nairobi por sus "obligaciones bajo el Derecho Internacional" al acoger dicha reunión entre miembros de las "terroristas" RSF y "individuos y grupos afiliados" a los paramilitares.
"Dado que el objetivo declarado del acuerdo es establecer un gobierno paralelo en parte del territorio sudanés, esta acción promueve el desmembramiento de un Estado africano, viola su soberanía e interfiere en sus asuntos internos", ha sostenido, antes de ahondar en que supone "una clara violación" del acta de creación de la UA y de la Carta de Naciones Unidas.
En esta línea, ha aseverado que "acoger a líderes de la milicia terrorista RSF y permitirles que lleven a cabo actividades políticas y de propaganda mientras siguen perpetrando un genocidio, masacrando civiles por motivos étnicos, atacando campamentos de desplazados y cometiendo violaciones, constituye un respaldo y una complicidad con estos atroces crímenes".
Por ello, Jartum ha insistido en que acoger esta reunión supone "una violación de los principios de buena vecindad" y "los compromisos de Kenia para no permitir actividades hostiles contra Sudán desde su territorio", si bien ha asegurado que "esta propaganda no tendrá impacto sobre el terreno".
"Las Fuerzas Armadas sudanesas y las fuerzas aliadas, respaldadas por el pueblo sudanés, siguen decididos a liberar cada centímetro del territorio sudanés manchado por esta milicia terrorista y sus mercenarios extranjeros. El progreso rápido y continuado hacia este objetivo sigue de forma incesante", ha apostillado.
PLANES PARA UN GOBIERNO PARALELO
La cumbre celebrada el martes entre representantes de las RSF, grupos políticos y grupos armados englobados en la Alianza Fundacional de Sudán se saldó sin un comunicado final para anunciar la formación del citado gobierno de unidad debido a que la facción del Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán-Norte (SPLM-N) liderada por Abdelaziz al Hilu pidió un aplazamiento de tres días.
El propio Al Hilu dijo durante la sesión inaugural que el acto suponía la fundación del "mayor frente civil en apoyo a una transición democrática, desarrollo y prosperidad" en Sudán, un paso destinado a poner fin al sufrimiento y la apertura de corredores humanitarios en el país africano.
En este contexto, Ezeldín al Safi, miembro de la delegación de las RSF, afirmó el martes que los integrantes de la citada coalición acordaron formar "un gobierno de paz" que será anunciado dentro de Sudán, sin fecha específica, según ha recogido el portal sudanés de noticias Sudan Tribune.
La reunión en Nairobi tuvo lugar en medio de los avances del Ejército sudanés en varios puntos del país, incluidos progresos en la capital, Jartum, y sus alrededores --integrados por Omdurmán y Jartum Norte--, donde han arrebatado diferentes ubicaciones a las RSF, encabezadas por Mohamed Hamdan Dagalo, conocido popularmente como 'Hemedti' y antiguo aliado del jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, Abdelfatá al Burhan.
La guerra civil estalló en abril de 2023 en el país africano a causa de las fuertes discrepancias en torno al proceso de integración del grupo paramilitar en el seno de las Fuerzas Armadas, situación que provocó el descarrilamiento de la transición abierta tras el derrocamiento en 2019 del régimen de Omar Hasán al Bashir.
Naciones Unidas hizo el lunes un llamamiento para obtener 6.000 millones de dólares (unos 5.730 millones de euros) para su Plan de Respuesta Humanitaria y de Refugiados para Sudán, que tiene como objetivo dar ayuda a 26 millones de personas en el país y en la región a causa de la crisis humanitaria derivada del conflicto, sin que por ahora haya visos de que las partes puedan alcanzar un alto el fuego.