El portavoz de UNICEF advierte de que seis millones de niños en Siria "requieren urgentemente de servicios de protección"
Abunda en la importancia de blindar el sistema educativo y cifra en más de 300.000 los artefactos explosivos sin detonar en todo el país
MADRID, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) Ricardo Pires ha reconocido que el nuevo Gobierno 'de facto' en Siria, encabezado por los yihadistas de Hayat Tahrir al Sham (HTS), es un "interrogante para todo el mundo", aunque ha animado a levantar las sanciones internacionales que pesan sobre sus líderes pues considera que esto facilitaría el trabajo de organizaciones humanitarias en el país.
"Cualquier decisión que venga a facilitar nuestro trabajo (...) es muy bienvenida", ha manifestado Pires durante una entrevista con Europa Press tras ser preguntado por las sanciones que Estados Unidos o la Unión Europea aún aplican sobre HTS a pesar de que su ascenso al poder ha sido visto con buenos ojos al ponerle fin al régimen de los Al Assad tras más de medio siglo en el Gobierno.
De hecho, Pires ha puesto en valor el aperturismo del que ahora hace gala una Siria que en las últimas semanas ha recibido a representantes internacionales y de organizaciones no gubernamentales, una situación que con el depuesto Bashar al Assad en el cargo era impensable. Pires ha defendido la importancia de estas reuniones para esclarecer la "muy grave" situación humanitaria por la que atraviesa el país.
"Estas visitas son importantes", ha subrayado un Pires que, a pesar de todo reconoce que la ofensiva relámpago de rebeldes y yihadistas que tumbó el régimen de Al Assad a comienzos de diciembre no deja de ser una transición política que el mundo no preveía que pudiera suceder de forma tan fugaz. "Es posible que se cambie una vez más. Esperamos que no, pero tampoco lo podemos descartar", ha dicho.
"Las autoridades que ahora están en Siria son un interrogante para todo el mundo. Entonces hay que tener una presencia en el país para que puedan hablar con las autoridades", ha manifestado un Pires que ha aprovechado para defender la reciente visita del director ejecutivo adjunto de UNICEF, Ted Chaiban, a Siria. "La puerta está un poco más abierta, entonces es importante que los líderes de la ONU puedan venir", ha dicho.
Según Pires, la visita de representantes internacionales a Siria servirá para que las nuevas autoridades tengan "más confianza en la comunidad internacional" y también en Naciones Unidas para "trabajar juntos". "Con el gobierno anterior estos esfuerzos eran muy ratos, no eran parte de la rutina (...) Antes la posibilidad de hablar era mucho más limitada. Ahora hay una oportunidad", ha dicho.
UNA SITUACIÓN AÚN "MUY GRAVE" PARA LOS NIÑOS
Pires, que en el momento de la entrevista se encuentra en la capital de Siria, Damasco, ha subrayado que allí la situación de seguridad es buena y que en las calles se percibe "más positividad" tras el cambio de régimen. Sin embargo, esto no debe ocultar que "para los niños la situación humanitaria sigue siendo muy, muy grave".
A pesar de que los últimos acontecimientos en el país suponen "una oportunidad" de actuación para UNICEF, el organismo sigue advirtiendo de que "millones de niños y niñas solo han conocido el conflicto" y que "los desafíos a los que se enfrentan las familias se han visto agravados por años de conflicto", que arrancó hace ya casi 14 años, en marzo de 2011.
Según datos de UNICEF, el conflicto deja en Siria más de 7,7 millones de niños en situación de necesidad humanitaria, más de un 70 por ciento de la población infantil del país. De estos, más de seis millones "requieren urgentemente servicios de protección" debido al auge de la "inseguridad" y de las "dificultades económicas" en algunas zonas del país donde la situación sigue siendo tensa.
Pires ha incidido en la importancia de "priorizar" el acceso a la educción, "empoderar a los docentes" y "fortalecer el sistema educativo" en Siria, donde dos millones de niños no acuden a las escuelas y otro millón más corre el riesgo de abandonar los estudios de forma prematura, exponiéndose a un mayor riesgo de trabajo infantil, matrimonios forzados o ser reclutados por grupos armados.
"Entonces, hay optimismo y una oportunidad de hacer mejores importantes, pero hay también una urgencia para que estos asuntos que todavía afectan a los niños no pasen desapercibidas. La comunidad internacional debe entender que en medio de esta euforia hay mucho trabajo y todavía hay mucho peligro para los niños", ha remachado.
EL PELIGRO DE LOS RESTOS EXPLOSIVOS SIN DETONAR
Más allá de la actual situación humanitaria y también política en el país, Pires ha hecho especial hincapié en el peligro que suponen los restos explosivos aún sin detonar para la población infantil de Siria. Según un último informe de UNICEF publicado a comienzos de semana, se estima que más de 320.000 artefactos explosivos están repartidos por todo el país.
Solo en diciembre de 2024, UNICEF recibió datos de 116 niños muertos o heridos por artefactos explosivos sin detonar, una media de casi cuatro menores al día. Se cree que se trata de una estimación a la baja dada la inestabilidad de la situación humanitaria sobre el terreno. En los últimos nueve años se han registrado al menos 422.000 incidentes de este tipo.
"Debemos abogar por un aumento de los esfuerzos humanitarios de desminado para eliminar los restos mortales de la guerra y hacer que las comunidades sean seguras de nuevo. Necesitamos ampliar la educación sobre el riesgo de minas explosivas para que los niños puedan reconocerlas y evitarlas, y debemos proporcionar un apoyo integral para supervivientes", ha concluido.