MADRID 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Embajada española en Kinshasa cerrará al público desde el próximo lunes ante el deterioro de la situación en la capital, al tiempo que ha pedido al más de un centenar de españoles que se encuentran en el país que extremen las precauciones en un momento de alta tensión, en particular en la región de Kivu Norte, donde el grupo rebelde M23 ha tomado la ciudad de Goma.
Fuentes diplomáticas consultadas por Europa Press han indicado que en República Democrática del Congo (RDC) hay 129 españoles, de los que 78 se encuentra en Kinshasa, la capital, y en torno a una docena en la zona más afectada por los combates en el este del país.
A todos ellos se ha dirigido la Embajada en un mensaje en la red social X, recogido por Europa Press. "Ante la volatilidad de la situación de seguridad se recuerda extremar las medidas de seguridad, evitar desplazamientos innecesarios y atender las recomendaciones de las autoridades y de esta Embajada", reza el texto.
El Ministerio de Asuntos Exteriores actualizó el lunes sus recomendaciones de viaje para el país africano, desaconsejando los viajes "no esenciales" y subrayando que "bajo ningún concepto" se debe viajar a Kivu Norte ante la ofensiva del M23 y la volatilidad de la situación en el terreno, después de que este grupo armado apoyado por Ruanda se hiciera con el control de Goma, la capital provincial.
A esto se sumó el ataque sufrido este lunes por varias legaciones diplomáticas en Kinshasa, entre ellas las embajadas de Francia y Estados Unidos, por parte de manifestantes que protestaban contra la caída de la capital de Kivu Norte en manos del M23.
Así las cosas, la Embajada ha informado de que a partir del lunes "cerrará la atención al público" y suspenderá "la tramitación de visados hasta nuevo aviso". "Los ciudadanos españoles que necesiten algún servicio urgente de atención consular deben ponerse en contacto con el teléfono de emergencias: +243 819 500 289", ha puntualizado.
Fuentes diplomáticas han precisado que se trata de un cierre temporal, que también incluye la suspensión de actividades culturales, y han aclarado que se seguirá prestando atención consular a los ciudadanos españoles que la requieran.