June 18, 2024, Nablus, Palestine: A Palestinian man inspects Palestinian cars that were vandalized by Jewish settlers assailants, in the village of Burin, south of the city of Nablus in the West Bank.,Image: 882760105, License: Rights-managed, Restriction - Nasser Ishtayeh / Zuma Press / ContactoPhoto
MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Departamento de Estado de Estados Unidos ha sancionado este jueves a tres individuos y cinco entidades israelíes por su vinculación con la violencia en Cisjordania, que ha aumentado a raíz de la ofensiva del Ejército de Israel contra la Franja de Gaza.
"Estados Unidos sigue muy preocupada por la violencia extremista y la inestabilidad en Cisjordania, lo que socava la propia seguridad de Israel. Alentamos al Gobierno de Israel a adoptar medidas para hacer que estos individuos y entidades rindan cuentas", ha indicado el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, en un comunicado.
Entre los afectados por las sanciones se encuentra Lehava, una organización de extrema derecha liderada por Ben Zion Gopstein --sancionado por Washington-- cuyos miembros han cometido actos de violencia, incluidas agresiones contra civiles palestinos.
Asimismo, en la lista también se encuentran cuatro puestos de avanzada controlados por personas que ya han sido sancionadas por Estados Unidos y que son utilizadas como "bases para acciones violentas" con el fin de desplazar a la población palestina.
"Puestos de avanzada como estos se han utilizado para alterar las tierras de pastoreo, limitar el acceso a los pozos y lanzar ataques violentos contra los palestinos vecinos", reza el comunicado emitido por el Departamento de Estado.
Otros dos sancionados son Reut Ben Haim y Aviad Shlomo Saird, que lideran Tzav 9, una organización que ha participado en acciones que "amenazan la paz, la seguridad o la estabilidad de Cisjordania". De la misma forma, Washington incluye en la lista a Isaschar Manne, "responsable o cómplice" de planificar actos de violencia en la zona.
Las medidas adoptadas por la Administración de EEUU implican la congelación de los activos que se encuentren en su territorio de las personas sancionadas y prohíben todas las transacciones realizadas por estadounidenses o en suelo estadounidense que impliquen a estos sancionados.