BOGOTÁ, 8 Ene. (Notimérica) -
La Misión de Verificación de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Colombia y la Conferencia Episcopal instaron al Gobierno colombiano y a la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) a que trabajen para preservar los beneficios que se han obtenido mientras ha estado vigente el cese del fuego bilateral, que llegará a su fin mañana 9 de enero.
En un comunicado conjunto, ambas instituciones afirmaron ser conscientes de la falta de consenso y las dificultades que atravesaron las negociaciones que se llevaban a cabo en Quito, pero también recalcaron el alivio que el proceso de paz ha llevado a la población gracias a la disminución de la violencia en la mayoría de las zonas que estaban afectadas por el conflicto.
Ambas partes comparten "la necesidad de un acuerdo de cese al fuego más robusto que genere mayor confianza entre ambas y en la sociedad colombiana", indicaron en el comunicado, que además añadía que los resultados de las negociaciones "son beneficios tangibles que redundan en mayor legitimidad para el proceso de paz".
Tanto la Conferencia Episcopal como la Misión de la ONU han participado como invitados en el proceso de negociación que mantenían el Gobierno colombiano y el ELN. Este comunicado conjunto llegó con la esperanza de que el cese al fuego bilateral pueda ser ampliado durante el quinto ciclo de negociaciones que empezará mañana martes 9 de enero.
Además, desde la guerrilla del ELN se produjo un cambio de discurso durante los últimos días del pasado año 2017 y, aunque criticaron abiertamente algunos aspectos de las negociaciones mantenidas con el Gobierno, también se mostraron dispuestos de llegar a un acuerdo para ampliar el alto el fuego bilateral en beneficio de toda la sociedad colombiana.