MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha efectuado este jueves una remodelación de Gobierno, con la que ha situado a su hasta ahora vicepresidente, Tareck El Aissami, como responsable del área económica, y a Delcy Rodríguez como su nueva 'número dos', para propiciar "un nuevo comienzo" tras las elecciones presidenciales del 20 de mayo.
A través de Twitter, Maduro ha indicado que "la épica victoria del pueblo el 20 de mayo obliga a un nuevo comienzo". "Por este mandato que me han dado todas y todos, he decidido una renovación parcial y profunda del gabinete ejecutivo", ha anunciado.
Para hacer realidad la "revolución económica" que prometió en campaña electoral para superar la grave crisis que sufre Venezuela, ha creado una Vicepresidencia Económica y "un poderoso Ministerio de Industrias y Producción Nacional" que ha encargado a El Aissami, a quien ha definido como un "experimentado y probado revolucionario".
En el antiguo cargo de El Aissami ha colocado a Rodríguez, actual presidenta de la Asamblea Constituyente. "Una mujer joven, valiente, aguerrida, hija de mártir, revolucionaria y probada en mil batallas", ha destacado el líder bolivariano en dicha red social.
Además, Yomana Koteich, será ministra de Comercio Exterior e Inversión Internacional con el mandato de "sustituir el modelo rentista por uno diversificado de exportación y aliento a la inversión extranjera"; Stella Lugo, de Turismo; Marleny Contreras, de Obras Públicas; Evelyn Vásquez, de Atención de Aguas; y Caryl Bertho, ministra de la Mujer.
También ha designado a Mayerlin Arias como ministro de Agricultura Urbana; a Dante Rivas, de Pesca y Agricultura; a Hipólito Abreu, de Transporte; a Eduardo Piñate, de Trabajo; y a Heryck Rangel, de Ecosocialismo.
"La juventud y las mujeres son la marca de este nuevo comienzo", ha valorado, al tiempo que ha dado las gracias a los ministros salientes: "Juntos logramos la paz, juntos conquistaremos el futuro. Nuevas responsabilidades les esperan. Cuento con ustedes para siempre".
Maduro se ha propuesto lanzar un proceso de "reconciliación nacional" para zanjar la crisis económica y social que arrastra desde la muerte de Hugo Chávez. Sin embargo, la oposición y la comunidad internacional, que no reconocen los comicios del 20 de mayo, le han exigido para ello que convoque auténticas elecciones presidenciales para este año.