Exteriores describe "la adicción de EEUU a la política de sanciones" como una amenaza a la paz internacional
MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Irán ha criticado este viernes la "hipocresía" de Estados Unidos, después de que el Departamento del Tesoro estadounidense impusiera nuevas sanciones a Teherán, en particular al ministro de Petróleo iraní, Mohsen Paknejad, y a varios buques y empresas.
El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Esmaeil Baqaei, ha condenado "enérgicamente" las nuevas medidas anunciadas por Washington y ha considerado que tal acción es "otra clara prueba de la hipocresía" de las "repetidas declaraciones de funcionarios estadounidenses sobre su disposición a negociar".
Asimismo, ha considerado que se trata de "otra señal de su hostilidad hacia el desarrollo, el progreso y el bienestar del pueblo iraní", mientras que ha "descrito la adicción de EEUU a la política de sanciones y presiones contra países independientes como una violación del Estado de derecho a nivel internacional, y una amenaza para la paz y la seguridad internacional".
"Las malvadas acciones de EEUU para interrumpir los intercambios económicos y comerciales de Irán con otros países son una clara violación de los principios y normas fundamentales del Derecho Internacional y el libre comercio", ha denunciado el portavoz, que ha responsabilizado al Gobierno estadounidense "de las consecuencias y efectos de tales acciones unilaterales e ilegítimas".
Por último, ha considerado que la medida del Departamento del Tesoro es "absurda y contraria a todas las normas". "Tales acciones indecorosas no pueden tener el menor impacto en la determinación nacional de los iraníes de defender la independencia y la dignidad de Irán y luchar por el desarrollo y la prosperidad de nuestro país", ha concluido.
Trump ha recuperado desde su retorno a la Casa Blanca la política de 'máxima presión' sobre Irán, país al que acusa de fomentar la inestabilidad en Oriente Próximo y de perseguir en el terreno industrial la obtención de armas nucleares, extremo este último que las autoridades iraníes siempre han negado.