Actualizado 17/12/2013 20:52

Surinam asume la Presidencia de Unasur

Desiré Delano Bouterse, presidente de Suriname
Foto: UNASUR

CARACAS, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El presidente de Surinam, Dési Bourtese, ha asegurado este viernes que su Gobierno trabajará con el resto de países de la región para aumentar la unión de Sudamericana durante el acto de asunción de la Presidencia temporal de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).

   Bouterse ha asegurado en su discurso que la unión del continente es un "trabajo inmenso", pero ha pedido el respaldo del resto de países para conseguir dicho objetivo. Surinam ha recibido este viernes la Presidencia temporal del bloque de manos de Perú.

   El presidente de Perú, Ollanta Humala, ha agradecido el apoyo mostrado durante su mandato al frente de Unasur, aunque ha asegurado que "todas las acciones y avances son el resultado del trabajo y esfuerzo de los Gobiernos de los Estados suramericanos comprometidos con la integración regional".

   Humala ha puesto de ejemplo de integración el respaldo mostrado al presidente boliviano, Evo Morales, cuando su avión fue retenido en Europa ante la creencia de que el ex analista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de Estados Unidos Edward Snowden viaja en su interior.

   El secretario general de Unasur, el venezolano Alí Rodríguez Araque, ha explicado que en la resolución aprobada el jueves por los ministros de Exteriores se hace hincapié en "el espíritu de unión independientemente de las diferencias", según ha informado Telesur.

   Por otro lado, el ministro de Asuntos Exteriores de Venezuela, Elías Jaua, ha señalado que desde el seno de esta organización rechazarán "cualquier tipo de intervención extranjera que vulnere la soberanía del pueblo sirio". Bolivia ha presentado un documento que deberá ser aprobado por el resto de países miembros para rechazar cualquier intervención extranjera en Siria.

   Esta cumbre de Unasur supone la vuelta al bloque de Paraguay, después de su expulsión temporal en junio de 2012 con la destitución en un juicio político del entonces mandatario, Fernando Lugo, por la represión de una protesta campesina en la que fallecieron 17 personas.