MADRID, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, ha ordenado imponer el toque de queda en los municipios de San Pedro Sula y Choloma y un despliegue de seguridad especial denominada Operación Candado Valle de Sula tras la muerte de 21 personas.
"Se inician múltiples operativos, allanamientos, capturas, y retenes durante las 24 horas, aplicando a partir de este día un toque de queda especial para Choloma; desde las 21.00 a las 4.00, y en SPS el toque de queda será a partir del 4 de julio. Tiempo 15 días prorrogables", ha explicado Castro en un hilo en Twitter.
Ya están en marcha operativos intensivos las 24 horas del día con el objetivo de frenar la violencia y capturar a los responsables de estos actos criminales, según recoge la prensa hondureña citando al Ministerio de Seguridad.
Castro ha pedido la colaboración ciudadana y ha anunciado una recompensa de 800.0000 lempiras (casi 30.000 euros) para quienes den información que conduzca a la captura de los responsables de las masacres de Choloma y San Pedro Sula. "Estas medidas buscan desmantelar las redes criminales que operan impunemente en la zona y devolver la paz y seguridad a los habitantes afectados", ha destacado la presidenta.
"He tomado medidas para darles seguridad ante el brutal y despiadado ataque terrorista a que están sometidos por los matones a sueldo entrenados y dirigidos por los cabecillas del Narcotráfico que opera impunemente en el corredor de la droga; valle de Sula", ha explicado Castro en Twitter.
Al cargo de la operación está el ministro de Seguridad, el general Gustavo Sánchez, acompañado por el coronel Julio A. Ruiz, de la 105 Brigada y la Policía Militar del Orden Público (PMOP).
De las 21 muertes violentas contabilizadas en la región del valle de Sula, once corresponden a una sola masacre ocurrida en un billar de la colonia Victoria, sector López Arellano, en el municipio de Choloma. Individuos fuertemente armados irrumpieron en el local y abrieron fuego indiscriminadamente y sin mediar palabra. Los fallecidos son diez hombres y una mujer que estaban dentro del lugar.