Publicado 02/06/2023 14:41

El exjefe de Seguridad de Bolsonaro defiende el golpe de 1964 ante la comisión de los ataques del 8 de enero en Brasil

Archivo - El general en la reserva Augusto Heleno Ribeiro y el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro.
Archivo - El general en la reserva Augusto Heleno Ribeiro y el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro. - Europa Press/Contacto/O Globo - Archivo


MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

El exministro del Gabinete de Seguridad del gobierno de Jair Bolsonaro, el general Augusto Heleno Ribeiro, ha defendido ante la comisión de investigación de los ataques del 8 de enero el golpe de Estado de 1964. "Salvó el país", ha dicho, provocando las protestas de algunos diputados que han anunciado acciones legales.

"El movimiento del 64 salvó al país", ha soltado Ribeiro, que al ser reprochado por sus palabras y recordarle como aquel golpe "instauró una dictadura militar sangrienta, que mató, secuestró y torturó opositores", respondió con un lacónico "esa es su opinión, diputado", cuestionó que fueran "miles" las víctimas.

"Su señoría cree que el movimiento de 1964 mató a miles de personas, lo que no pasó, cree que fue un movimiento de venganza, de odio, cuando el movimiento del 64 salvó a Brasil de un giro al comunismo. De eso no hay duda, basta con leer la historia, Brasil estuvo a un paso de convertirse en un país comunista", ha dicho.

En respuesta, el diputado del Partido Socialismo y Libertad (Psol) Fábio Felix, ha acusado a Ribeiro de haber cometido un crimen en la Cámara después de sus alabanzas al golpe del 64 y ha adelantado que pondrán en marcha acciones legales "serias" por este "ataque a la democracia y al Estado de derecho".

"Fue una apología de la dictadura militar. Eso es inaceptable en una cámara legislativa, ningún diputado estaría aquí la dictadura fuese un movimiento normal. Él humilló a personas que murieron, fueron asesinadas, con esa defensa absurda dentro de un parlamento", ha dicho.

ATAQUES DEL 8 DE ENERO

Ribeiro ha cuestionado el uso del términos "golpe" para referirse a lo que ocurrió aquel 8 de enero en Brasilia, cuando miles de seguidores de Bolsonaro irrumpieron violentamente sobre las sedes de los tres poderes.

"Tratarlo de 'golpe' no es correcto. Un golpe necesita tener líderes, no es una acción fácil, menos en Brasil. El término golpe está siendo utilizado con extrema simpleza", ha teorizado, mientras ha calificado de "fantasiosas" la teoría de que Bolsonaro y los suyos pretendieron anular los resultados de las elecciones.

En cuanto a esas elecciones, Ribeiro ha subrayado que el papel del Ejército ha sido "claro" en la historia de Brasil. "Siempre se guió por la legalidad, la democracia. No había razón para manifestarse. Como ministro no podía pasar por delante del presidente y declarar algo que era de su competencia", ha zanjado.

El general Heleno también ha aprovechado su intervención para elogiar los campamentos que se levantaron frente a los cuarteles del Ejército y en los que se pedía una intervención militar. Para él, no eran más que espacios "sanos", en los que se "rezaba mucho" y "las personas se reunían para hablar de política".

"Había muchas mujeres y niños (...) Duró mucho tiempo sin ningún acontecimiento reseñable, ni consecuencias nocivas. Fue una experiencia nueva en términos de manifestación política, ordenada, disciplinada, que debe haber influido algo en los movimientos políticos brasileños", ha valorado.