MADRID 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado este viernes una orden ejecutiva para revisar todas las medidas tomadas por su predecesor, Joe Biden, sobre regulación de armas para "proteger" la Segunda Enmienda de la Constitución.
"La segunda enmienda es una garantía indispensable de la seguridad y la libertad. Ha preservado el derecho del pueblo estadounidense a protegernos a nosotros mismos, nuestras familias y nuestras libertades desde la fundación de nuestra gran nación", reza el decreto publicado por la Casa Blanca.
En este sentido, alega que "el derecho a poseer y portar armas no debe ser violado". El presidente ha ordenado así examinar en el plazo de 30 días todas las órdenes, reglamentos, directrices, planes, acuerdos internacionales y otras acciones tanto de departamentos como de agencias sobre los derechos de los estadounidenses protegidos bajo la Segunda Enmienda.
Esto incluye cualquier tipo de medida tomada en los últimos cuatro años que pueda haber afectado a la Segunda Enmienda, así como las normativas promulgadas po la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos relativas a armas de fuego.
El decreto firmado este viernes por el magnate también pide revisar las clasificaciones de las agencias sobre armamento y municiones, así como la tramitación de las solicitudes para fabricar, transferir o exportar armas de fuego.
Pocos minutos después de firmar la orden, la Asociación Nacional del Rifle ha aplaudido que Trump haya cumplido su promesa de revertir las medidas tomadas durante el mandato del expresidente Biden con respecto a la regulación de las armas.
"Los miembros de la NRA (por sus siglas en inglés) han sido muy útiles, resultando ser un número récord para asegurar su victoria y ahora se está demostrando que (Trump) es digno de estos votos, fe y confianza en sus primeros días en el cargo", ha resaltado el vicepresidente ejecutivo, Doug Hamlin, en un comunicado.
Por su parte, el director ejecutivo del Instituto de la NRA, John Commerford, ha indicado que "tras cuatro largos años los propietarios de armas ya no tendrán que preocuparse por ser objetivo de una administración radical anti-armas".