Insiste en su petición para que los países de la OTAN eleven el gasto en Defensa al 5 por ciento del PIB: "Debería haberse hecho hace muchos años".
MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha defendido en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza) su interés por avanzar en la resolución de conflictos internacionales y se ha mostrado dispuesto a verse "pronto" con su homólogo ruso, Vladimir Putin, sugiriendo que una bajada en el descenso del precio del petróleo implicaría el fin "inmediato" de la guerra en Ucrania.
"Hace tres días, tomé juramento y comenzó la era dorada de Estados Unidos", ha dicho Trump, en una comparecencia telemática donde básicamente ha recuperado las grandes líneas discursivas que ya planteó el lunes desde la Casa Blanca y con las que busca pasar página de los "desastres" que, según sus propias palabras, "heredó de un grupo de absolutos ineptos".
La "revolución de sentido común", en palabras de Trump, aspira a agitar el sistema político y económico norteamericano pero busca igualmente que sus ecos trasciendan. Así, ha defendido la emergencia decretada en la frontera con México para frenar la "invasión" migratoria y que Estados Unidos vuelva a ser un país "fuerte y soberano", lo que lleva implícita una nueva amenaza a la imposición de aranceles a todos los países que sigan sin plegarse a las demandas en ésta y otras materias.
Trump ha defendido la vuelta a los combustibles fósiles, entre ellos el petróleo, cuyo precio global confía en bajar. El presidente norteamericano ha adelantado que pedirá a Arabia Saudí y a la OPEP una rebaja del precio, entendiendo que los niveles actuales no favorecen tampoco a la paz.
"Si el precio (del petróleo) bajase, la guerra entre Rusia y Ucrania terminaría inmediatamente. Ahora mismo, el precio es tan alto que la guerra sigue", ha dicho Trump, que en estos primeros días ha intentado venderse como un líder "pacificador" sin plantear una 'hoja de ruta' exacta para poner fin a conflictos como el ucraniano.
"No habíamos visto nada así desde la Segunda Guerra Mundial", ha añadido el magnate republicano, que ha llegado a hablar de "millones" de muertos pese a que ninguna de las dos partes beligerantes ha dado cifras tan altas, al tiempo que ha declarado que le "gustaría" verse "pronto" con Putin.
Trump, no obstante, ha evitado poner fecha a un posible acuerdo de paz para que el que sí ve a Ucrania "dispuesta" y en el que confía que colaboren otros actores internacionales, en particular China. Cree en última instancia que es un conflicto que "nunca debería haber comenzado" y que, de hecho, no se habría iniciado si él hubiese enlazado un segundo mandato en la Casa Blanca.
Trump ha reiterado además que pedirá a los países de la OTAN que eleven su gasto en Defensa hasta el 5 por ciento del PIB, algo que "debería haberse hecho hace muchos años". En este sentido, ha reivindicado que fue bajo su primer mandato cuando los aliados avanzaron hasta el umbral de 2 por ciento para poner fin a un desequilibrio "injusto" con respecto a Estados Unidos.
Por otro lado, ha vuelto a señalar que fue su equipo quien "negoció" el alto el fuego entre Israel y Hamás que entró en vigor la semana pasada --"no habría ocurrido sin nosotros", ha apostillado--.
CONTRA LA CENSURA
El flamante mandatario norteamericano ha repasado además algunas de las medidas de índole interno, como la orden ejecutiva con la que busca "acabar con toda la censura del Gobierno", en pleno debate internacional sobre el control que se debe ejercer sobre las redes sociales.
"El Gobierno ya no etiquetará las palabras de nuestros ciudadanos como desinformación, la palabra favorita de los censores", ha argumentado Trump, comprometido también con que haya una justicia "imparcial" tras los múltiples frentes judiciales que se abrieron en su contra durante los últimos años y que le han llevado a ser el primer presidente condenado en la historia de Estados Unidos.