BRASILIA, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se ha reunido este lunes con varios de sus ministros para acordar una respuesta ante las denuncias de que la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA) había espiado a la mandataria y al presidente de México, Enrique Peña Nieto, cuando aún era candidato presidencial, según ha revelado la cadena brasileña Globo, que basa su información en documentos filtrados por Edward Snowden.
Los ministros de Justicia, José Eduardo Cardozo, de Comunicaciones; Paulo Bernardo; de Defensa, Celso Amorim; y el ministro de Relaciones Exteriores, Luiz Alberto Figueiredo, han participado en la reunión, celebrada después de que el embajador estadounidense en Brasil, Thomas Shannon, haya sido convocado para una reunión con Figuereido, que aún no se ha celebrado.
Desde Porto Alegre, la ministra de Derechos Humanos, María do Rosario, ha denunciado la violación de la soberanía brasileña que supone este tipo de espionaje y ha advertido de que el Ejecutivo podría recurrir a Naciones Unidas para denunciar estas prácticas, como ya había avanzado Cardozo.
"El principio del multilateralismo es exactamente la cooperación y la confianza entre los gobiernos y entre las naciones, y si un gobierno de una nación vigila a los líderes de otras naciones soberanas del mundo, significa un violación absoluta de la soberanía y los Derechos Humanos intolerable desde el punto de vista de las relaciones internacionales en el período histórico actual", ha apostillado Do Rosario.
Según ha explicado Globo, la información sobre el espionaje a los dos mandatarios latinoamericanos se fundamenta en una presentación de la NSA cuya información solo era accesible para cinco países: Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Canadá y Nueva Zelanda. En el documento, fechado en junio de 2012, se explica en detalle cómo se espían las comunicaciones de Rousseff y Peña Nieto y se celebra, al final, el "éxito" del trabajo.
Globo también ha dado a conocer otro documento filtrado por el exanalista Snowden al periodista Glenn Greenwald (quien reside en Rio de Janeiro) en el que Brasil encabeza una lista de países sobre los que Estados Unidos tiene dudas. El documento, 'Identificando los retos para el futuro', formula la pregunta "amigos, enemigos o problemas" e incluye, además de Brasil, a Egipto, India, Irán, México, Arabia Saudí, Somalia, Sudán, Turquía y Yemen.