WASHINGTON, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
Darren Wilson, el agente de la Policía que mató a tiros al joven afroamericano Michael Brown en la ciudad de Ferguson, en el estado estadounidense de Misuri, dice vivir ahora en un "complejo aislamiento", tratando de mantener a salvo a su familia, después de haber recibido "una serie de amenazas de muerte".
En un artículo en la web de la revista estadounidense 'The New Yorker', en el que se incluyen declaraciones que forman parte de una entrevista que se publicará la próxima semana en su edición en papel, Wilson ha contado cómo ha cambiado su vida desde aquel momento, después de que fuese absuelto de cargos criminales, pese a que Brown se encontraba desarmado cuando recibió los disparos.
Wilson explica que ahora vive en una nueva vivienda comprada con dinero obtenido a través de donaciones, en una localización secreta, donde se encuentra en una situación de "completo aislamiento", ya que --según afirma-- a duras penas puede salir con su familia a cenar fuera.
El ex agente asegura no ha podido encontrar trabajo después del incidente, que por ser un "asunto demasiado incendiario", que le ha convertido en alguien "imposible de contratar". Asimismo, agrega que lo que quiere es "pasar página".
Esta entrevista llega en un momento en el que crece de nuevo la tensión y se planean más protestas en Ferguson de cara al fin de semana, cuando se cumple un año desde la muerte de Brown.