Publicado 17/12/2014 21:00

Cuba.- Los cubanos de Florida celebran la normalización de las relaciones bilaterales

MIAMI, 17 Dic. (Reuters/EP) -

Los 1,5 millones de cubanos que viven exiliados en Florida han celebrado la decisión de los gobiernos de Barack Obama y Raúl Castro de normalizar las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, poniendo fin así a más de medio siglo de enemistad.

Florida, ubicada a poco más de 100 kilómetros de la isla caribeña y que alberga al 80 por ciento de la población cubana en Estados Unidos, es un buen termómetro para valorar la acogida de la llamada diáspora cubana.

"Es increíble, estoy eufórico, he estado trabajando para este momento 25 años", ha dicho Hugo Cancio, que llegó a Miami en el bote Mariel en 1980. "Es un nuevo comienzo, un sueño hecho realidad para los 11,2 millones de cubanos en Cuba, y creo que provocará un cambio de mentalidad aquí también", ha explicado.

En la misma línea se ha expresado Pedro Freyre, un abogado asentado en Miami. "No es una exageración decir que este es un día histórico", ha dicho el cubano-estadounidense, que se define como un demócrata conservador.

RECHAZO POLÍTICO

Sin embargo, los líderes políticos de Florida se han mostrado radicalmente en contra de lo que la Casa Blanca ha definido como "un cambio de rumbo" en las relaciones bilaterales, admitiendo que la estrategia de aislar a Cuba no ha sido todo lo exitosa que se creía.

"Creo que no deberíamos negociaron con un régimen represivo para hacer cambios en nuestras relaciones", ha considerado el ex gobernador de Florida, y posible candidato republicano para las elecciones presidenciales de 2016, Jeb Bush.

El senador republicano Marco Rubio ha reaccionado a las excarcelaciones de los últimos presos cubanos de 'los cinco' condenados por espionaje en Estados Unidos, considerando que sientan un "peligroso precedente".

"Las acciones del presidente Obama son una traición inconsciente de los valores fundamentales estadounidenses y un profundo insulto al pueblo cubano oprimido", ha dicho, por su parte, el congresista Mario Díaz-Balart.