Por Desarrollando Ideas.
CARACAS, 11 Ago. (Notimérica) -
En Venezuela se están dando durante los últimos años unos cambios políticos que tendrán consecuencias irreversibles a partir de los próximos meses. Las elecciones presidenciales venezolanas de 2013 las ganó el actual presidente Nicolás Maduro, sin embargo, fueron unos resultados muy ajustados en los que las fuerzas opositoras integradas en la MUD casi alcanzan en votos al oficialismo.
En este contexto, la economía hacía estragos debido a la caída de los precios petrolíferos. La crisis política, económica y social se fue intensificando, lo que se materializaba en escasez y protestas en la calle.
Cuando en 2015 se celebraron elecciones parlamentarias, la MUD obtuvo dos tercios de la Asamblea Nacional. Aunque Maduro en teoría reconoció el resultado, en la práctica todas las leyes que se han aprobado han sido bloqueadas por vía judicial.
De este modo se ha consolidado el enfrentamiento abierto entre el Ejecutivo Nacional y la Asamblea Nacional. La MUD sólo contempla una solución: la salida de Maduro del poder. Para ello, la vía por la que lucha es la consecución de un referendo revocatorio, que sólo podrállevarse a cabo si se genera suficiente capacidad de movilización por parte de la oposición y se dejan de lado las diferencias dentro de la misma.
Por su parte, el gobierno cuenta con sus propios apoyos; sin el respaldo popular y con el nuevo poder legislativo en contra, Maduro busca aliados en las instituciones del poder para bloquear las iniciativas opositoras, concretamente el Tribunal Supremo de Justicia y el Poder Electoral, que le ofrecen ayuda por las vías judiciales para frenar las iniciativas de la oposición.
El objetivo de Maduro es atrasar o impedir un revocatorio. Venezuela se enfrenta a una situación de incertidumbre, aunque el último anuncio de la CNE, que prevé la recolección de firmas para finales de octubre, permite hacer algunas predicciones de futuro.
Si, como afirma la CNE, la recolección de firmas se lleva a cabo a finales de octubre, el órgano electoral contaría con un plazo de 15 días para validarlas y 3 días para convocar el referendo revocatorio. El mismo debería llevarse a cabo 90 días después como máximo.
Si el gobierno consumiera estos 90 días, el revocatorio se celebraría en 2017, de manera que en caso de que Maduro fuera revocado, lo sustituiría el vicepresidente actual. Así, el 'chavismo' se mantendría en el poder.
La comunidad internacional no ha obviado la situación venezolana, ya que afecta a toda la región. Han sido varios los países, personalidades y organizaciones que se han pronunciado sobre esta cuestión, como la OEA o los nuevos gobiernos de Argentina y Brasil.
En definitiva, se puede afirmar que es previsible que Venezuela esté a punto de experimentar un cambio irreversible, que además puede incluir la salida del poder del presidente Maduro.
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