MADRID, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
Canadá ha reiterado que no reconoce el segundo mandato que Nicolás Maduro ha iniciado este jueves como presidente de Venezuela y le ha instado a ceder el poder a la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, hasta la celebración de nuevas elecciones.
"Hoy, el régimen de Nicolás Maduro ha perdido cualquier apariencia de legitimidad. Habiendo tomado el poder a través de unas elecciones fraudulentas y antidemocráticas el 20 de mayo, ya se ha consolidado plenamente como una dictadura", ha declarado la ministra de Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, en un comunicado.
Así, ha negado "la legitimidad del nuevo periodo presidencial" de Maduro y le ha instado a "ceder inmediatamente el poder a la democráticamente elegida Asamblea Nacional hasta que se celebren nuevas elecciones con la participación de todos los actores políticos y tras la liberación de todos los presos políticos".
Freeland ha advertido a Maduro de que, si insiste en mantenerse en el Palacio de Miraflores, "el sufrimiento de los venezolanos no hará más que empeorar". "Los canadienses estamos con el pueblo de Venezuela y su deseo de restaurar la democracia y los Derechos Humanos", ha recalcado.
La canciller canadiense ha avanzado además que su Gobierno "seguirá emprendiendo acciones potentes", recordando que ya ha dictado sanciones contra 70 altos cargos venezolanos y ha apoyado la denuncia contra Maduro en el Tribunal Penal Internacional (TPI) por crímenes de lesa humanidad.
PUNTO DE INFLEXIÓN
El líder 'chavista' ha tomado posesión este jueves para un segundo mandato, conforme al resultado de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 20 de mayo, en las que se impuso con un 67 por ciento de los votos, de acuerdo con datos oficiales.
La oposición venezolana y buena parte de la comunidad internacional no reconocieron los resultados electorales por considerar que fueron fruto de un proceso fraudulento y, en consecuencia, tampoco reconocerán el segundo mandato de Maduro. Además, algunos países han anunciado ya una batería de sanciones diplomáticas y económicas contra Venezuela.
Como muestra del rechazo interno, la investidura se ha celebrado en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), controlado por magistrados 'chavistas', porque la Asamblea Nacional, donde suelen tener lugar las tomas de posesión de los presidentes venezolanos, se ha negado a acogerla.
En cuanto a la comunidad internacional, los únicos presidentes latinoamericanos que han acudido a Caracas para atestiguar el arranque del segundo mandato de Maduro han sido los de Cuba, Bolivia, Nicaragua y El Salvador, miembros del llamado eje bolivariano.
El Grupo de Lima --formado por catorce países de América Latina y el Caribe-- ha boicoteado el acto, a excepción de México, que ha estado representado por su encargado de negocios en Caracas. Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y sus estados miembros no han enviado a nadie.