SAO PAULO, 12 Jun. (Reuters/EP) -
Los trabajadores del Metro de Sao Paulo han descartado una nueva huelga y han prometido que trabajarán con normalidad este jueves, día de la inauguración del Mundial de fútbol en el estadio Arena Corinthians, poniendo fin a los temores de una paralización en el medio de transporte.
Sin embargo, los trabajadores han decidido en una asamblea realizada este miércoles manifestarse durante esta jornada inaugural para reclamar el reintegro de los funcionarios despedidos durante la huelga de cinco días que terminó en la noche del lunes.
Los trabajadores estudian realizar manifestaciones diarias, simultáneas a sus negociaciones con el gobierno estatal. La paralización que comenzó la semana pasada provocó enormes trastornos en la ciudad, además de grandes atascos en las carreteras de la ciudad.
Una nueva huelga el jueves habría complicado demasiado el acceso al estadio Arena Corinthians, al que los hinchas acceden principalmente mediante la Línea Roja del Metro, que une al este y oeste de la ciudad.
LA HUELGA SE TRASLADA A LOS AEROPUERTOS DE RÍO
En una movilización separada, el sindicato municipal de trabajadores de la aviación de Río de Janeiro (Simarj) ha decidido realizar una huelga en los aeropuertos Santos Dumont, Galeão y Jacarepaguá a partir de las 00.00 horas (hora local) del jueves.
El sindicato, vinculado a Força Sindical, ha explicado que la huelga ha sido convocada finalmente después de "nueve meses de intensas negociaciones y debido a la intransigencia de los sindicatos de los empleadores".
Los miembros del sindicato exigen a las empresas aéreas un reajuste salarial real y un abono extra por el incremento de trabajo derivado del Mundial. Brasil disputará el partido inaugural frente a Croacia este jueves a las 17.00 horas (hora local).