MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Policía Federal de Brasil investiga la presencia de infiltrados de las Fuerzas Especiales del Ejército en los hechos violentos del pasado 8 de enero en Brasilia, así como si facilitaron de alguna forma el asalto de los seguidores del expresidente Jair Bolsonaro a las sedes de los Tres Poderes.
Según las imágenes a las que ha tenido acceso la investigación y a las declaraciones de varios detenidos por esos hechos, efectivos de esta fuerza de élite del Ejército estuvieron desplegados en puntos estratégicos de la Plaza de los Tres Poderes, según ha revelado el diario 'O Globo'.
Nuevas pruebas sugieren que estos militares --conocidos como 'chicos negros' por el color de sus atuendos-- fueron los primeros en irrumpir en la sede del Congreso, así como en facilitar el ingreso de los asaltantes, muchos de los cuales confirmaron la presencia de estas personas y recibir órdenes de cómo actuar.
Las imágenes de las cámaras de seguridad en poder de la Policía muestran a hombres vistiendo el pasamontañas que suelen utilizar estos militares y cuya actuación aquel día recordó a la de estos. Se trata de una tropa de élite experta en acciones de guerra irregular, como guerrilla urbana, o insurgencia.
Estos grupo de élite de las Fuerzas Especiales ocupó decenas de puestos importantes en el gobierno de Bolsonaro, donde la presencia de militares era ya de por sí numerosa. Uno de estos 'chicos negros' era el general de la reserva Ridauto Fernandes, quien ocupó un cargo en el Ministerio de Salud.
Fernandes tuvo que prestar declaración la semana pasada por sus publicaciones en redes sociales en las que se le ve participando de los hechos de aquel día. Reconoció que fue a protestar por el resultado de las elecciones, pero aseguró que regresó a casa cuando la situación comenzó a empeorar.