MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Bolivia, Luis Arce, ha investido este lunes a los tres nuevos altos mandos militares del Ejército en un acto celebrado en La Paz desde donde ha pedido a quienes integran la institución que ante casos "trágicos" como los ocurridos durante la crisis política de 2019 y 2020 se "allanen" y respondan ante la Justicia "sin hacer valer ningún cargo".
A través de decreto presidencial, el general Augusto García Lara ha sido nombrado nuevo Comandante en Jefe Accidental de las Fuerzas Armadas; mientras que el general de Brigada Aérea Teófilo Medina será el nuevo Jefe de Estado Mayor Accidental; y el capitán de Navío Francis Salaza es el nuevo Comandante general Accidental de la Armada, informa la agencia ABI.
"Las Fuerzas Armadas tiene por misión fundamental defender y concertar la independencia, la seguridad y estabilidad del Estado, el honor y soberanía nacional, asegurar el imperio de la Constitución, garantizar la estabilidad del gobierno legalmente constituido y cooperar en el desarrollo integral del país", ha defendido el presidente Arce.
"El militar no puede tener pausas, pues, llevar el uniforme significa deber de tiempo completo y a esto debe añadirse el grado militar, a mayor grado y mayor jerarquía, mayor deber y mayor entrega", ha dicho Arce, quien ha pedido a los militares guardar en todo momento "subordinación y disciplina", pues es "la columna vertebral" desde la que cumplir "su alta misión institucional".
El presidente boliviano ha reconocido el papel del Ejército durante la crisis sanitaria y les ha agradecido su labor durante el último año en otros campos, como la lucha contra el contrabando y el narcotráfico, así como en programas sociales del Estado, como el que facilita la escolarización de los más pequeños.
En ese sentido, Arce ha abogado por un Ejército que colaboren "en otros terrenos", como la cultura, la educación, el crecimiento económico, o la salud. "Promoveremos el desarrollo de unas poderosas Fuerzas Armadas comprometidas con su pueblo", ha dicho.
Por último, el presidente boliviano, en calidad de "capitán general", ha recomendado al nuevo mando militar que no permita que "por un momento de esparcimiento social" los uniformados "descuiden sus deberes y su disciplina".
A su vez, también les ha pedido que ante "sucesos trágicos y luctuosos", como los que ocurrieron en las pasadas crisis políticas de 2019 y 2020, y "por un principio moral con el honor castrense", aquellos militares que tuviera que enfrentarse a la Justicia lo hagan "como cualquier ciudadano común y corriente (...) desde el llano sin hacer valer ningún cargo de nombramiento".