Los seguidores del exmandatario acusan a Arce de tratar de "robar las siglas" del partido y asestar un "golpe al movimiento indígena"
MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de dirigentes y militantes del Movimiento Al Socialismo (MAS) afines al presidente de Bolivia, Luis Arce, han anunciado este jueves que tomarán la sede nacional del partido, después de que el Tribunal Constitucional haya emitido una sentencia en la que desautoriza al expresidente Evo Morales como su líder y reconoce a Grover García, próximo a Arce, como presidente de la formación.
El grupo de arcistas se han congregado en la plaza Murillo de la La Paz para festejar el fallo del Constitucional que valida el congreso oficial del MAS celebrado en El Alto, a las afueras de la capital boliviana, donde Grover García surgió como el elegido para suceder a Arce. La sentencia deja por tanto sin validez el congreso que celebró Morales en paralelo en la localidad de Lauca Ñ, en el departamento de Cochabamba, en el que salió como máxima autoridad del partido.
Los seguidores de Arce han reclamado además al exmandatario que devuelva una suma de 10 millones de bolivianos (1,36 millones de euros) que presuntamente habría sacado de las arcas de la formación para "financiar los bloqueos", según los líderes arcistas, ha informado la cadena de televisión boliviana Unitel.
"Es justo que el Movimiento al Socialismo regrese a sus verdaderos dueños, a las organizaciones sociales. Nosotros hemos cumplido con todos los estándares de nuestro estatuto y reglamento interno. (...) Corresponde tomar las oficinas de la dirección nacional del MAS, pero también corresponde llamar a la unidad del pueblo boliviano, a los militantes, a los simpatizantes", ha señalado el dirigente de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarias de Bolivia, Vidal Gómez, presente en la plaza.
SEGUIDORES DE EVO RECHAZAN LA SENTENCIA
Por su parte, desde el evismo han rechazado la sentencia del Tribunal Constitucional, han cuestionado a sus magistrados, y han descrito el fallo como un "segundo golpe al movimiento indígena y a la Bolivia profunda", en palabras del diputado Renán Cabezas recogidas por el citado canal.
En línea con las palabras del expresidente Morales, que ha calificado el fallo de "inconstitucional, ilegal e ilegítimo", han acusado al Ejecutivo de Arce de querer "robar" las siglas del MAS tildándolo de "dirigencia corrupta".
"Les decimos a estos usurpadores, a estos hijos de la corrupción, que nunca podrán borrar la historia de las polleras y los ponchos de los verdaderos revolucionarios. Esto le decimos al Gobierno corrupto de Arce y a sus cómplices subordinados", ha añadido Cabezas.