BUENOS AIRES, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
La activista argentina Milagro Sala, condenada a tres años de cárcel por instigar escraches contra el gobernador de la provincia de Jujuy, Gerardo Morales, ha intentado clavarse una tijera en el abdomen tras conocer las nuevas investigaciones abiertas en su contra.
Según la organización indígena Tupac Amaru, liderada por Sala, "el jueves pasado, al ser informada sobre las tres nuevas causas armadas en su contra (...), tuvo una crisis en medio de la cual intentó clavarse una tijera en su abdomen".
"Esta situación fue desbaratada por las internas que estaban junto a ella", recibió la visita de una psicóloga y ya se encuentra "bien", de acuerdo con el coordinador de Tupac Amaru, Alejandro Garfagnini, citado por el diario argentino 'La Nación'.
"Milagro está repuesta. El sábado por la tarde recibió a un grupo de militantes universitarios y este domingo lo pasó junto a su familia", ha subrayado Tupac Amaru a través de su cuenta oficial en la red social Twitter.
Además, ha desmentido "categóricamente" las informaciones que circularon en un primer momento y que "han generado angustia en sus familiares, amigos y militantes". En un principio se dijo que había sido atacada por otras presas y después que había llegado a apuñalarse.
Sala lleva más de un año detenida en la prisión de Alto Comedero. El pasado diciembre recibió una condena a tres años de cárcel en suspenso, lo que significa que, de no reincidir, no se ejecutará la pena. Sin embargo, sigue recluida a la espera de que esclarezcan las acusaciones en su contra por diversos delitos que van desde corrupción a tentativa de homicidio.
Tupac Amaru es un grupo sindical de naturaleza indígena que está vinculado a la Central de Trabajadores de Argentina (CTA). Cuenta con 70.000 afiliados y está presente en 15 de las 23 provincias que forman la nación austral.