Ondo Ossa se niega a reconocer la legitimidad del líder de la junta militar y recuerda que es un primo del presidente depuesto
MADRID, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
El principal candidato opositor a las recientes elecciones presidenciales en Gabón, Albert Ondo Ossa, ha descrito el golpe de Estado contra Ali Bongo como "una revolución de palacio" y ha reclamado que se publiquen los "verdaderos" resultados de los comicios, en los que asegura haberse hecho con la victoria, para que se le reconozca como el auténtico mandatario en el país africano.
Ondo Ossa ha afirmado en una entrevista concedida a la cadena de televisión francesa TV5 Monde que la asonada, encabezada por el hasta entonces jefe de la Guardia Republicana --la 'guardia pretoriana' de Bongo--, Brice Oligui Nguema, "no fue un golpe de Estado", sino un intento de la familia del presidente para mantenerse en el poder.
Así, ha recordado que "Nguema es primo de Ali Bongo" y ha sostenido que "los Bongo han encontrado a quien aparte a Ali Bongo para continuar de forma efectiva el sistema Bongo-PDG", en referencia al Partido Democrático Gabonés, la formación liderada por el presidente depuesto.
"El sistema Bongo continúa, no es un golpe de Estado", ha recalcado, al tiempo que ha indicado que detrás de este "golpe de palacio" está Pascaline Bongo, hermanastra de Ali Bongo, quien la apartó de sus puestos de responsabilidad tras asumir el poder en 2009 tras el fallecimiento de su padre, quien había liderado el país desde 1967.
Las relaciones entre Pascaline Bongo, quien fue ministra de Exteriores entre 1992 y 1994, además de encabezar el Gabinete del Presidente desde 1994 y 2009, y su hermanastro han sido crecientemente tirante desde entonces, lo que ha llevado a Ondo Ossa a decir que "la que está detrás de Nguema es Pascaline Bongo".
El opositor, candidato por parte de la coalición Alternancia 2023 --integrada por seis partidos--, ha recordado que entre los lemas de su campaña estuvo que "60 años de Bongo son muchos", en referencia a los 56 años de mandato por parte de Omar y Ali Bongo, antes de lamentar que "el sistema Bongo continúa".
En este sentido, ha abundado en que "no ha habido un golpe de Estado militar", sino que "ha sido dado por la 'guardia pretoriana'". "El resto del Ejército no ha estado vinculado", ha manifestado, antes de negarse a reconocer la legitimidad de Nguema como "presidente de transición", cargo que jurará durante la jornada del lunes.
"No hay que preguntarse eso (en referencia a quien es el líder legítimo), sino ir al recuento y dar los verdaderos resultados, que demuestran quién es legítimo", ha señalado, al tiempo que ha reclamado que "se publiquen los resultados verdaderos, conocidos por todas las legaciones diplomáticas".
De esta forma, ha hecho hincapié en que es "un demócrata" y ha rechazado "los golpes de Estado". "Pido a los militares que vuelvan al orden republicano", ha puntualizado, antes de especificar que hasta el momento no ha mantenido contactos con Nguema a raíz de la asonada y el derrocamiento de Bongo.
"Creo que he ganado las elecciones, no soy yo el que tiene que ir a ver a Nguema, es él quien tiene que venir a verme", ha destacado Ondo Ossa, quien ha resaltado que antes de la votación alertó sobre "un golpe de Estado electoral" por parte de Bongo para intentar mantenerse en el poder ante la posible victoria opositora.
"Hay un presidente legítimo y legal", ha reiterado, en referencia a sí mismo, antes de abundar en que cuenta con los resultados oficiales, si bien se ha negado a desvelarlos. "Soy muy legalista. Es la comisión electoral la que tiene que dar los resultados. Yo los tengo, pero no es mi función", ha explicado.
"UN BONGO HA SUSTITUIDO A BONGO"
Por otra parte, ha vinculado las manifestaciones espontáneas de alegría tras el golpe de Estado a que "los gaboneses salieron a las calles para celebrar la salida de Bongo". "Ahora ven que los Bongo no se han ido, es un Bongo quien ha sustituido a Bongo y se dan cuenta de la realidad", ha argumentado.
"Ningún ejército del mundo ha podido jamás hacer frente a una población decidida. La población es la única fuerza, lo que se ha visto en muchos países", ha señalado el candidato de Alternancia 2023, que ha dicho "no tener miedo" y "estar dispuesto a morir".
"Si quieren, pueden matarme, pero no matarán la revolución que se prepara y Gabón vencerá. El clan Bongo será apartado", ha prometido, antes de negarse a reclamar la liberación de Bongo, ya que la disputa "es un problema familiar". "Yo me centro en los problemas de Gabón. Que arreglen sus problemas en familia, a mí no me concierne", ha remachado.
Por su parte, el director de campaña de Alternancia 2023, Mike Jocktane, ha celebrado "la valentía y patriotismo" de los militares, si bien ha abogado por la reanudación del proceso electoral bajo la supervisión de las Fuerzas Armadas al considerar que Ondo Ossa tuvo una "gran victoria en las urnas", pero que el recuento se vio interrumpido.
"Al final de este proceso, que debería continuar bajo la supervisión de nuestras Fuerzas Armadas, Albert Ondo Ossa verá formalizada su victoria en las urnas. (...) Este es el camino hacia la democracia y el Estado de Derecho", ha declarado, animando a los gaboneses que representan "la abrumadora mayoría" a que no "renuncien a esta elección".
Los golpistas denunciaron tras la asonada que "el país atraviesa una grave crisis institucional, política, económica y social" y recalcaron que las recientes elecciones "no cumplieron con las condiciones de transparencia, credibilidad e inclusividad esperadas por los gaboneses", motivo que habría desencadenado la asonada.
Bongo, que permanece bajo arresto domiciliario, ha pedido en un vídeo ayuda a la comunidad internacional, a la que ha emplazado a "hacer ruido" frente al autoproclamado Comité para la Transición y la Restauración de las Instituciones (CTRI), nombre oficial de la junta.
Según los resultados oficiales de las elecciones, Bongo se había hecho con el 64,27 por ciento de los votos, mientras que Ondo Ossa habría recibido el 30,77 por ciento de los apoyos. La coalición Alternancia 2023 había apuntado el martes a la existencia de unas tendencias "muy favorables" en el recuento de los votos y reclamó al mandatario la organización de "un traspaso pacífico del poder".
Todas las victorias electorales de Bongo desde 2009 han estado marcadas por las denuncias de fraude. El presidente sufrió un infarto cerebral en 2018 que le apartó durante casi un año de la esfera pública, si bien declinó apartarse. Apenas unos meses después, en enero de 2019, un grupo de militares protagonizó una asonada que fue desarticulada por las autoridades.