LOS ÁNGELES, 14 Jul. (Notimérica/EP) -
La actriz estadounidense Halle Berry ha tardado muchos años en confesar públicamente una de las anécdotas más curiosas sobre sus inicios en el mundo del cine.
La razón por la que Berry decidió mantenerse alejada de la ducha durante ocho semanas fue su voluntad por sentir y plasmar de la forma más real posible el espíritu del personaje al que dio vida en la película 'Jungle Fever', adicto al crack.
"Obviamente no estaba dispuesta a fumar crack, fue ahí donde marqué mis límites. De esto han pasado ya 23 años, en esa época yo era la chica nueva y tenía que intentar destacar como fuera, así que no me lavé durante todo el tiempo que duró el rodaje, para aportar realismo a mi papel. Fue una experiencia asquerosa, pero tengo que decir que había partes de mi cuerpo que por supuesto mantuve aseadas, digamos solo eso", relató en el talk show americano 'Live with Kelly and Michael'.
Por suerte, esta aventura sólo fue el comienzo de una reconocida carrera cinematográfica que llevó a la actriz a obtener, 11 años después, un Óscar a la mejor interpretación por su papel en 'Monster's Ball', una estatuilla que Berry conserva 'bajo llave' en su habitación, según publica 'Vanidades'.
"Tengo el Óscar en mi habitación, así que las visitas no pueden verlo directamente. Está bien protegido y en un lugar muy íntimo de mi hogar. En mi casa no solemos dejar los premios en cualquier parte, ya que no queremos que sea tan evidente que ahí viven dos actores. Pero hay ciertos lugares, como mi dormitorio, que son privados, reservados solo para mí.", indicó la artista.
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