WASHINGTON, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
Rosy Esparza, de 50 años y origen latino, murió este fin de semana tras salir proyectada de la montaña rusa en la que estaba tras precipitarse casi 23 metros al vacío e impactar en una barra de hierro, según han informado medios locales.
El accidente, que muchos testigos achacan a una negligencia del personal del parque, tuvo lugar en el 'Six Flags', un centro recreativo de Texas, Estados Unidos. Esparza montaba en la fatídica montaña rusa con su hijo y nuera cuando cayó con la atracción en movimiento. Una vez finalizado el recorrido, su hijo gritaba alertando a los operarios que su madre se había caído, según relató un testigo que hacía cola para montar.
Aunque la investigación aún se mantiene, las autoridades locales han indicado que la mujer impactó contra una barra de hierro tras caer el vacío desde 23 metros. Ayala salió despedida mientras la atracción descendía por su primera pendiente.
La autopsia ha revelado que la mujer sufrió múltiples heridas causadas por traumatismos, incluido un fuerte golpe en el pecho.
El parque recreativo, abierto desde 1961, manifestó sus condolencias a la familia y anunció el cierre temporal de la atracción. Esta gigantesca montaña rusa, conocida como 'Texas Giant', tiene un altura superior a 40 metros y una caída de 79 grados de inclinación y un ángulo de giro de 95 grados. Renovada en 2010 cuando se invirtió 10 millones de dólares para instalarle unos raíles de acero, llevó a sus primeros 24 pasajeros allá por 1990.