64-74 para el equipo turco en un partido lleno de altibajos
MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Real Madrid ha perdido este jueves por 64-74 frente al Anadolu Efes en la jornada 10 de la liga regular de la Euroliga, pese al conato de remontada liderado por el base argentino Facundo Campazzo, el mejor de los blancos con sus, a la postre, inrfuctosos 20 puntos y 24 créditos de valoración.
No empezaron bien las cosas para los locales en el WiZink Center, encajando un pequeño parcial por culpa de Darius Thompson, autor de un triple lateral y un robo a media pista culminado en mate. Luego Stanley Johnson, con una canasta sobre la bocina, y el exmadridista Vincent Poirier, hundiendo el aro, ampliaron aún más la renta visitante.
Por parte del Real Madrid, Mario Hezonja se mostraba fallón y estaba bien defendido por el propio Johnson, mientras Alberto Abalde no tenía fortuna en su tiro desde el perímetro y Eli John Ndiaye andaba perdido en ataque. Además, un triple de Ercan Osmani y otro robo de Thompson a media cancha --para forzar falta-- nutrieron la cosecha del Efes.
Quedaban 4:04 para terminar el primer cuarto y Chus Mateo solicitó tiempo muerto en busca de la reacción. Pero no solo no llegó, sino que el equipo turco aumentó diferencias con el juego interior de Osmani y Poirier. Por si fuera poco, Rolands Smits con un mate al contragolpe puso el 4-19 con 46.2 por agotarse en el reloj de ese primer acto.
Cortó la mala racha de los merengues un Gaby Deck que no funcionaba como revulsivo, como tampoco lo hacía hasta ese momento Xavier Rathan-Mayes, de los más destacados 48 horas antes en el triunfo por 98-86 ante la Virtus Segafredo Bolonia. Para el segundo cuarto, iniciado con 6-19 en el marcador, la dinámica siguió parecida pese al baile de nombres.
Serge Ibaka, Sergio Llull y el joven Hugo González dieron relevo a algunos titulares, pero sin hallar el modo de contrarrestar la destreza del Efes en el poste bajo. Entonces el técnico visitante, Tomislav Mijatovic, pidió calma a los 'bajitos' de su plantel con +17 a 7:01 para el descanso.
Sin el lesionado Shane Larkin, Elijah Bryant se erigió en hombre clave, 'bombita' incluida para subir el 10-30 al electrónico de un pabellón más apagado que en la cita contra la Virtus. Un triple de Facu Campazzo para el 16-32 pudo revertir eso, pero un 2+1 inmediato del propio Bryant guardó las distancias. Calma y más calma quería Mijatovic.
El plan del entrenador croata rozaba la perfección a tenor del 17-40, que creció hasta el 18-45 tras un triple de Jordan Nwora. A cuentagotas, con tiros libres de Ibaka, un par de acciones de Hezonja y una entrada al aro de Campazzo, los madridistas limaron su desventaja para irse al intermedio 25-47 abajo, pero sin valer un triple lejanísimo del Facu.
En la reanudación, Deck cogió la responsabilidad ofensiva mientras, en defensa, el resto del conjunto blanco trataba de cerrar huecos a Rodrigue Beaubois como compinche de Thompson y Poirier. Enfrente empezó a carburar Campazzo, merced a un triple con tres defensores encima y tras quejarse de una posible falta previa que los árbitros ignoraron.
Mijatovic gastó tiempo muerto, que sirvió de poco ya que su equipo perdió el balón ante el empuje de Hezonja nada más sacar de banda. No obstante, el alero croata cometió falta en ataque, discutida por el banquillo y por una afición que anhelaba el comienzo de la remontada.
Otra virguería de Campazzo, una falta en ataque de Bryant, un triple de Hezonja, un rebote capturado por Walter Tavares y una falta cometida por Poirier pusieron los cimientos para creer en el enésimo milagro del Real Madrid. En colapso amenazaba con entrar un Efes que no sabía cómo frenar a la dupla Campazzo-Hezonja, ésa que tantas veces ha brillado.
Un triple de Nwora desde la esquina, a la contra después de un robo de Thompson, estableció el 45-57 a menos de dos minutos para finiquitar el tercer periodo. Pero ni desde la línea de tiros libres encontraba el cuadro otomano una tregua, viéndose 49-58 al término del minuto 30 y con Dogus Özdemiroglu errando un triple en suspensión sobre la bocina.
Tampoco acertó Özdemiroglu en otro lanzamiento desde más allá del arco al arrancar un último cuarto de pesadilla para el Efes. No en vano, Hezonja sí que clavó un triple frontal y luego Llull metió la canasta del 54-58 apoyándose en el tablero durante un contraataque, habiendo transcurrido solo minuto y medio, suficiente para enfadar a Mijatovic.
A la salida de otro tiempo muerto pedido por el técnico visitante, un triple de Beaubois y un rebote ofensivo de Daniel Oturu en la cara de 'Edy' Tavares calmaron las aguas. Pero fue fugazmente, pues al Efes le costaba un mundo fabricar puntos y eso se unió a la insistencia de Llull en los triples, anotando el que firmó el 61-63 a 5:17 de la conclusión.
La sombra de la prórroga planeaba el WiZink Center desde hacía rato, como reminiscencia del eterno duelo que protagonizaron estos dos mismos equipos el pasado 5 de enero, cuando jugaron hasta cuatro tiempos extra. En esa tesitura, merodeó Hezonja la igualada en el marcador con un mate al contragolpe que impidió Thompson con un tapón atrapando el balón.
La jugada tuvo revisión arbitral varios minutos, para ver al último en tocar la pelota y si Thompson había pisado o no la línea de fondo al lanzársela a Hezonja, que estaba en el suelo. La posesión favoreció al Real Madrid, donde agarró galones Llull para forzar falta en una penetración al aro, aunque el de Mahón coló un solo tiro libre (62-63).
En los dos siguientes ataques del Efes, un triple de Derek Willis y otro de Beaubois situaron el 62-69, para desánimo de un WiZink al que aún le restaban por ver 2:23 de partido raro. Aunque era el guion habitual de una remontada merengue, Campazzo falló dos triples seguidos y el cronómetro se esfumaba entre parón y parón del trío arbitral.
Falta técnica pitaron Lottermoser, Nikolic y Udyanskyy a Campazzo tras el segundo de esos lanzamientos errados, lo cual sirvió al equipo de Estambul para auparse al 62-70 casi definitivo. Entre nuevos errores del Real Madrid en tiros lejanos, las protestas de Llull que le valieron ser eliminados y el manejo del reloj, el encuentro no tuvo más historia.
Esta derrota colocó a los pupilos de Chus Mateo con un balance de 4-6, a rebufo de las posiciones del 'play-in' y de nuevo con sensaciones malas en un otoño que se le está atragantando. El Efes, ahora con un registro de 6-4, ocupa puestos más adelantados y busca incluso la zona de unos 'playoffs' que se encarecen paulatinamente.